Si fuera vagina sería la de...
la peli de Almodóvar, Hable con ella, en la que entraba el hombrecito.

Si fuera pene sería el de...
cada uno de mis novios... mientras fueron mis novios.

Ojalá se inventaran los preservativos de...
descarte automático, que por sí mismos vayan y se tiren.

Si mi cama hablara diría...
“te amo, te odio, dame más”, by Charly García.

Quisiera tener dos...
vidas para repetir lo repetible y olvidar lo incorregible.

Nadie lo sabe, pero en el baño, inmediatamente después...
quito pelo por pelo, pelo por pelo que sea y que haya quedado esparcido a la basura... Esos pelos. Detesto que haya pelos caídos, detesto.

¿Qué palabras no puede evitar decir en ese momento?
Según: “Qué rico, qué rico”, o “todo bien, ni te preocupes. Hoy por ti, mañana por mí”.

¿A quién le gustaría ver en una porno?
A un luchador de sumo. ¿Perderá o ganará tan rápido como en el juego?

¿Dónde se haría un agujero nuevo?
Aunque suene cursi, en algunos recuerdos, para rellenarlos de gozosas buenas nuevas.

¿Cuántos son multitud?
Tres. Definitivamente tres.

¿Qué detalle bajo la ropa le saca las ganas?
Regastado el calzón; que las medias y/o el calzón no combinen; camiseta en verano.

¿Cuál es su posición favorita?
La próxima.

¿Qué es para usted un polvo mágico?
En el subte, con tremendo guapo sentado enfrente, abro los ojos y se bajó en la estación anterior.

¿Cómo le hace saber que es “ahí”?
No sé cómo hago, pero se entera.

¿Cuándo miente?
Casi nunca... Ningún orgullo, problema grande que llevo.

El tamaño no le importa salvo que...
¿En cordobés? Más vale chiquita y juguetona que grandota y tontona. Y las excepciones vividas, claro.

¿Qué quiso siempre y nunca tuvo?
El del subte. Cada vez que abro los ojos se bajó en la estación anterior.

Tiene que durar más que... pero menos que...
más que lo bueno pero corto, y menos que lo largo y encima aburrido.