De un estudio de impacto económico del “Diseño de Indumentaria de Autor en la economía local durante 2012”, realizado y publicado por el Observatorio de Tendencias INTI y la Fundación ProTejer, se desprenden las siguientes afirmaciones: “Los ingresos anuales del diseño de indumentaria en su apartado de autor alcanzaron los

$ 587.000.000”, “son 232 las firmas que producen esa categoría de diseño”, “la producción anual es de 1.150.000 prendas, así como que el 8 por ciento de las empresas son conducidas por mujeres”. Pero para ahondar en los nuevos modos de los diseñadores se impone además un paneo por el modus operandi de los nombres más representativos de 2012.

Por un lado, en los días previos a la Navidad, un flyer con los respectivos logos de los diseñadores y el título “La noche de los diseñadores” invitaba a un tour por sus tiendas entre las 17 y pasada la medianoche. El recorrido se extendió desde Belgrano a Chacarita, Palermo y Recoleta, y propuso la siguiente hoja de ruta: el puntapié inicial fue en el atelier de Vanesa Krongold, cultora de siluetas coloridas y post pop que pudieron apreciarse en un desfile celebrado en la tienda conceptual Kabinett, para continuar en Mila Kartei. Los anfitriones fueron Proyecto Cuadrilla, Tupa y Panorama, una nueva tienda conceptual. Para concluir con las duplas Pablo Bernard y Cherie Lee. Mientras que las diseñadoras Schang Viton, Troyer y Emilse Benítez ensayaron una alianza efímera. Corresponde aclarar que el trío de señoritas que esa noche se sumaron a la celebración desde Palermo participó durante agosto 2012 de “La ciudad de moda” en BafWeek. El atelier donde Schang Vitón recibió con té y limonada está situado en la antigua dependencia de servicio de un edificio de estilo francés de Barrio Norte y en cuya planta baja reside la diseñadora Rosina, quien suele regalarle algunas telas de sus colecciones de antaño. Su abordaje para la colección debut llamada “Metamorfosis” fue arbitrario, (¿por qué no hacer ropa que partiera de la indecisión y que pudiera funcionar como una respuesta a ciertas temáticas?). Emilse Benítez acostumbra vestirse de negro, usar borcegos, el pelo corto y piercings en el rostro. Proyecta ardides que se corresponden con los bocetos de cultores de la estética leather, corsés y chalecos que lucen cual variaciones de la chaqueta Perfecto. Graduada en la UBA, su flirt con la estética rock se enfatizó y profesionalizó cuando Agustina Troyer la llamó para sumarse como coequiper en desarrollos para vestuarios de la banda Babasónicos. Troyer cursó buena parte de la carrera de indumentaria como un secreto compartido con su abuela, ya que por mandato familiar estaba a punto de graduarse de notaria en economía. Actualmente, desde el showroom donde comparten las colecciones propias y los vestuarios conjuntos, comentaron que en 2013 realizarán la colección masculina de Ona Sáez.

El caso de moda que representa Proyecto Cuadrilla, la pequeña y prolífica tienda que en Palermo abrió el colectivo de diseñadores que componen Desastreria –firma de indumentaria femenina ideada por Catalina Ichaso y Lucinda Walmsley– exalta nuevos usos y rescates de la sastrería, Urenko, Decrisci, Ladrón de Guevara y Fernando More. Se manifiestan como “un grupo de diseñadores que propone un cambio en la concepción y el modo de operar en el mundo del diseño planteando una idea de integración y proyección en conjunto”. Las prendas conviven en los percheros se turnan para oficiar de vendedores y, como contaron en una charla ocurrida en la Universidad de Morón sobre sus métodos y abordajes, aseguraron que el diseñador peruano Diego Labrín Ladrón de Guevara es el experto en números de la cuadrilla. Y quienes fueran sus socios iniciales, Li Torres, abrieron un nuevo showroom en tándem con otros diseñadores.

Otra noticia de 2012 remite al celebrado regreso de Unmo Clothink, la nueva tienda de Marcelo Ortega, pionero de la moda de autor desde la Bond Street, que ahora exhibe en el nuevo hot spot de la moda y el arte que representa la Galería Patio del Liceo, así como también la apertura del nuevo showroom de Cecilia Gadea, cultora de los bordados en láser y vestidos a medida exquisitos en un salón preciosista contiguo al pasaje Soria.

Para concluir con el breve recuento de la moda 2012, en la última y nueva edición de las “Tijeras de Plata” que otorga la Cámara Argentina de la Moda, celebrada ya sin sus mesas de gala, y en el auditorio El Aleph del Centro Cultural Recoleta, un jurado compuesto por veinte expertas en moda premió con la iconoclasta tijerita contenida en una caja de acrílico. Así, en la categoría revelación se premió a Marcelo Giacobbe, cuya colección verano 2013 abordó entre sus premisas el imaginario de sirenas que habitan las profundidades del mar y la actividad social en las playas de los años ’50. La Tijera para la Alta Costura correspondió al diseñador Jorge Ibáñez por su colección de soireés llamada “Mambo italiano”, y el galardón referido a la colección “Pre Couture” fue para Evangelina Bomparola. Mientras que la colección “Identidad” y también la “Tijera de oro” correspondieron al diseñador Pablo Ramírez por su colección “Carmen”, presentada durante marzo en el Colón. Como contracara, en marzo de 2013 y en el contexto de BafWeek, se apreciarán los resultados de una alianza entre Pablo Ramírez y la firma Muaa con anclaje democrático y para adolescentes.

Mientras que Martín Churba, el diseñador de Tramando, además de recibir el Premio Konex 2012 y de realizar una colección de ropa deportiva para Topper, a mediados de diciembre lanzó su nueva línea de diseños para la casa.