[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

La publicidad de cerveza Schneider que propiciaba los “apoyos” en el transporte público pudo pararse, en gran medida, gracias a los más de 5537 “me gusta” que cosechó la fan page Repudio a la campaña en vía pública de cerveza Schneider en Facebook y la acción militante que derivó de esa respuesta contundente. Si la Primavera Arabe se propagó por las redes sociales antes de derivar en millones de personas en las calles, ¿cómo desperdiciar esa herramienta que pone de inmediato un tema en discusión? El tetazo virtual del 29 de agosto fue otra acción que –esta vez– cuestionó a la misma red social (Facebook censura las fotos de pezones) con una acción colectiva: subir a la red social fotos de tetas con sus pezones. Los ejemplos son múltiples y las acciones no siempre llegan al mismo éxito, pero las redes sociales son hoy tan útiles para las activistas de los distintos feminismos como en su época lo fueron el megáfono, el mimeógrafo o los aerosoles.

Virginia Cano fue una de las impulsoras del tetazo, junto a Noe Gall. En aquella convocatoria habían escrito: “Porque las batallas no sólo se dan en la calle, en las plazas y en las camas, también tienen su campo de ballata en la virtualidad, arma de doble filo según la cual tus tetas pueden ser ofensivas (y dignas de censuras) o donde sólo pueden ser difundidas para el entretenimiento de la platea masculina; cuando pueden ser hermosas y alegremente colectivas”. La acción fue fugaz pero contundente. Sobre la respuesta, Virginia dice que fue “¡¡¡genial!!!”. “La verdad es que el temor era que fuéramos unas pocas, y que simplemente nos sintiésemos más o menos expuestas. No fue así para nada. Se postearon en menos de dos días más de cuatrocientas fotos. De todos los colores, tamaños, perspectivas y decorados. Lo interesante también fue ver que la interpelación fue acogida por muchos cuerpos e identificaciones sexo-genéricas. En un primer lugar, nosotras pensábamos en la censura a tetas de mujeres, y prontamente comprendimos que este reclamo no era privativo de aquellas que se autoperciben como mujeres, sino de muchxs otrxs”, relata Virginia. El tetazo duró 48 horas –era parte de la acción decidir cuándo levantar las imágenes– pero tiene su estela en: http://www.tetazovirtual.blogspot.com.ar/.

También un blog, http://bastadesexismo.blogspot.com.ar/, impulsa en este mismo momento una campaña para repudiar las expresiones sexistas de Guillermo Pardini en Duro de domar. El 19 de junio pasado, cuando el panelista dijo: “Lo lógico es que si yo soy caballero con vos y te pago todo, ahora sé damisela vos y hacé lo que tenés que hacer”. A partir de esas palabras, la autora del blog lanzó una página en Facebook llamada “Repudio a Pardini por sus ‘chistes’ misóginos” y la impulsa desde su propia fan page, Basta de Sexismo, que tiene 3163 seguidores. Su autora prefiere el anonimato por una razón laboral y otra personal. Diremos que se llama A., y lleva ese blog desde 2007, aunque recién recaló en Facebook en 2009. “Soy bastante pesimista. La gente que linkea mi página es gente que ya está convencida. Mi mirada de lo que circula en las redes sociales está sesgada por el perfil de los que aparecen en mi muro. Cuando busco alcanzar a gente que no está convencida, que era la meta de mi blog, me doy cuenta de que en realidad no ha cambiado nada, no creo que las mentalidades hayan cambiado”, dice sobre los efectos del activismo en las redes sociales sobre las ideas que van formando lo que se llama “sentido común”.

Acciones Feministas apunta a horadar esos sentidos instalados, naturalizados. En este caso, se trata de un colectivo autogestivo de Bahía Blanca, que cuenta con colaboración y trabajo de varias mujeres, aunque la más activa en cuestiones de redes sociales es Verónica Bajo. Además, lleva adelante un micro radial para desnaturalizar el lenguaje sexista. “Surgimos en el 2009 ante la necesidad de ponerle acción a nuestro feminismo”, cuenta Verónica sobre el trabajo realizado, a partir de la campaña “Por un lenguaje sin sexismo”. Además, ahora se están jugando a instalar las “elecciones de reinas en fiestas populares” como formas de violencia a las mujeres por parte del Estado. “El interés es creciente, y varias funcionarias se han comunicado con nosotras, ya que consideran este planteo como muy novedoso por el alto grado de naturalización que tiene este tipo de violencia. A través de Facebook hemos difundido una enorme cantidad de ejemplos con videos de elecciones de reinas, reglamentos de los concursos de postulantes, cosa que no es habitual de ver en las redes”, apuntó Verónica. Justamente, ella busca materiales nuevos –o les da otro sentido a los existentes– para poner a circular.

Verónica subraya que “Facebook ha sido una poderosa herramienta de expansión de nuestro activismo, y muy efectiva para impulsar acciones”, y rememora que “en 2010 hicimos la convocatoria para la primera marcha de orgullo lgtb vía redes y mail, unos días antes del 28 de junio, porque estábamos en duda, ya que Bahía Blanca es hostil, o indiferente por lo menos, pero la inminente aprobación del matrimonio igualitario y básicamente todo el trabajo de años anteriores del colectivo lgtb en Bahía generó una participación importante, con una emotiva marcha donde participaron más de 100 personas”. Este año, en febrero, Verónica escuchó 60 canciones de Sambayonny para desnudar su contenido altamente sexista, lo posteó en Facebook y generó una movida que llegó a ocupar una doble página de Páginal12, en la edición del 13 de febrero, además de un debate social de proporciones. Porque, justamente, se trata de una dinámica entre el mundo virtual y el real. En la calle y en la web, todas las formas de denuncia contra el sexismo son válidas.