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La exaltación de la camisa blanca, las remeras níveas con el logo de una corona y los trajes de chaqueta y pantalón para jóvenes ejecutivas representaron en 1994 el boom de los básicos de moda que Paula Cahen D’Anvers predicó en los comienzos de su firma. Pasaron veinte años de los inicios de esa marca: los locales reflejaban las prédicas del interiorismo minimalista cruza con shabby chic de la fundadora (el primero, situado en el mall Paseo Alcorta tuvo un lounge con sillones de madera poblado de almohadones de lino blanco) mientras que en los exhibidores también níveos la ropa para mujer se hacía lugar entre una colección para niñxs, bebés y una línea de ropa para el hogar. A mediados de noviembre, en los salones de la Mansión del Hotel Four Seasons, transcurrió un cóctel celebratorio del aniversario: allí recibían la gigantografía de una corona dispuesta en la entrada (el logo sería replicado hasta en los ceniceros dispuestos en el parque) seguida de una puesta de flores blancas como locación para que posaran los invitadxs, mientras que los nobles espejos de la mansión exhibieron stencils improvisados con marcadores en sus superficies.

Uno de los salones cobijó una pequeña retrospectiva de campañas de la firma –diez tomas– dispuestas en backlights que recordó los lazos de Paula –así se denomina a la marca de modo coloquial– con modelos de la escena internacional: así como el invierno 1999 tuvo como imagen de campaña a la modelo Amber Valetta, en el verano 2000 la protagonista fue Kate Moss (vestida con un bikini negro y en el apogeo de su carrera). La marca que fuera vendida al grupo Exxel y luego a Vesuvio y que hace algunas temporadas pareció virar a ejes más streetwear y rocker vuelve a reafirmar la vuelta a su sastrería clásica. Como indicador remitirse a la campaña del verano 2015 donde la modelo lleva un traje blanco con un moño y zapatillas. Cecilia Anavi, la gerente de marketing de la firma y quien realiza lineamientos de las campañas de cada temporada, se refiere a las actuales premisas de diseño que se extienden a los 38 locales en Argentina, Chile y a las franquicias en Paraguay, Perú, Bolivia y Uruguay.

¿De qué modo resignificaron las prédicas de los comienzos de la marca y cuál es el actual rumbo de diseño de la firma?

–Hace 20 años Paula fue pionera en el diseño de la sastrería y en incorporar la remera blanca para toda hora. En la actualidad continuamos trabajando para volver a los orígenes y fortalecer nuestro ADN: enaltecer al blanco y seguir reafirmando el liderazgo de la sastrería, los “básicos”, y la camisa.

¿Cómo se hacen las lecturas de tendencias e inspiraciones ante la globalización y la información instantánea desde las redes sociales y las publicaciones online?

–El equipo de producto viaja dos veces al año para observar y captar las tendencias mundiales. Por otro lado, están constantemente observando a las principales marcas por Instagram y demás redes.

¿Cuál es la prenda más taquillera y emblemática de la firma? ¿Acaso hay alguna que reeditan?

–La camisa Paula blanca y la remera básica son las prendas más taquilleras, y por eso las reeditamos año tras año.

¿Consideraron cambiar el nombre de la marca?

–Nunca se pensó en cambiar el nombre. Paula ya tenía una identidad muy fuerte y respetada. Hubiera sido un error cambiarla.

¿Qué reflejan las actuales campañas de la firma?

–En las campañas tratamos de reflejar a la mujer Paula; consideramos que se trata de una mujer joven urbana y actual que encuentra en Paula Cahen D’Anvers una propuesta clásica que le aporta diferenciación, estilo y elegancia. A cada nueva campaña la realizamos junto a los directores de arte Rafael Olarra y Coty Larguia, el fotógrafo Pato Battelini, el estilista Andrés Pastor y los videos de Juan Marcos Lecchu.

¿Quiénes componen los equipos de diseño?

–El equipo está formado por seis diseñadoras, que trabajan junto a Lucrecia Kerr. Inés Aquino diseña la sastrería y las camisas. Mientras que Candela Santos desarrolla junto a Maia Liberman los accesorios, la ropa de noche y el calzado; Julieta Monteserin y Iara Courbrant desarrollan los jeans, los tejidos y el algodón.

¿Consideran que la corona mantiene su vigencia como logo de la firma?

–La corona que simboliza la sofisticación, la nobleza y la elegancia es el logo de la marca. Todos esos atributos siguen estando muy vigentes en cada colección.