“Cuando una recuerda esos nefastos días donde hubo asesinatos nada más y nada menos que por la protesta social, parece que ha pasado tanto tiempo... Y no, son diez años. Para Madres, como para Abuelas, lo que pasó el 19 y 20 de diciembre de 2001 significó reafirmar la resistencia ante el atropello, ante el atentado al principal derecho humano que es la vida. Físicamente acompañamos: fuimos a la Plaza, nos bombardearon con gas lacrimógeno. Me acuerdo que estábamos en la sede de Piedras, abajo, y en eso que vienen corriendo unos muchachos y les abrimos la puerta, los hicimos meter a todos, y la policía quedó afuera. Seguimos resistiendo ante tanto dolor. Han pasado diez años y como nos hemos recuperado, en fin: siempre apostando por la vida. Siempre apostando por la justicia. Justicia legal. Así llegamos a estos días, celebrando los derechos humanos y asistiendo a una asunción presidencial. Todo es un logro de la militancia y de tanta gente que siempre ha estado firme defendiendo esta democracia.”

* Madre de Plaza de Mayo.