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OPINION
Juan Jose Panno

Favoritos: terminan siendo los de siempre

Boca va a formar seguramente con Abbondanzieri; Calvo, Schiavi, Traverso, Matellán; Vargas, Cascini, Cagna; Guglielminpietro; Cangele, Palermo. Cuando vuelva Tevez de los Juegos Olímpicos ocupará el lugar de Cangele y cuando esté en condiciones de reaparecer Guillermo Barros Schelotto el DT le procurará un lugarcito. Y en el banco quedan Medrán, Donnet, Jerez y los promisorios Alvarez y Ledesma. River va a formar con Costanzo; Gerlo, Nasuti, Tuzzio, Juan Fernández; Pereyra, Ledesma, Zapata, Sambueza; Maxi López, Sand. Cuando vuelvan Salas, Gallardo, Mascherano y Lucho González desplazarán a tres de los cuatro del medio y a Sand. Boca y River, como se dice cuando se eligen los equipos en los picados de barrio, tienen “robo”.
Los boquenses, que ya no cuentan con el plus de calidad que garantizaba Carlos Bianchi, incorporaron algunos futbolistas que no estaban en el torneo anterior, pero que son viejos conocidos y no necesitarán demasiado tiempo para la adaptación. A River se le fue Cavenaghi y se va a arreglar con lo que tiene en casa, que no es poco por cierto. Cualquiera de los otros 18 clubes que disputan este campeonato armarían la base de sus equipos con los descartes de Boca y River, y seguramente tendrían más aspiraciones que las que poseen con sus planteles actuales.
¿Quién le puede hacer sombra a los dos grandes? A la vista no aparece ningún enemigo de peso. En San Lorenzo, el DT Gorosito camina sobre la cuerda floja, sin demasiada libertad para tomar decisiones y con un plantel discreto. Se diluyó lo de Batistuta, pero se queda Romagnoli que, si logra una buena sociedad con Olivera, Luna y Montillo, podrá ser eje de un buen circuito creativo, sostenido por el noble Michelini haciendo el aguante en la mitad de la cancha. No es gran cosa pero, con lo que hay, San Lorenzo, pese a que perdió consistencia con la venta de Gonzalo Rodríguez, puede entrar en la discusión si se le dan buenos resultados en las primeras fechas.
Vélez, que no movió el mercado, tiene un plantel de jóvenes que se conocen bastante bien, lo cual no es una garantía de éxito, pero por lo menos le da la ventaja de no tener que empezar de cero, como lo harán Racing e Independiente, que han producido significativas variantes en sus planteles. Alguna esperanza ponen los de Independiente en Flores, Bustos Montoya e Insúa y los de Racing en Lucchetti, Mannara y Cardetti, pero tanto el Pato Fillol como Daniel Bertoni necesitarán tiempo para armar un equipo en serio.
Lo mismo le pasa a Alfio Basile en Colón y a Américo Gallego, que no sabe si podrá disponer de Jardel y Ortega. Arsenal, favorecido por un fixture acomodado, corre con la ventaja de jugar contra los cinco grandes como local, pero eso no implica que vaya a dar pelea por el título.
La recorrida por estos equipos llevará inevitablemente en la conclusión de que Boca y River son, una vez más, los grandes favoritos. Los ganadores de 9 de los 12 últimos campeonatos corren con el caballo del comisario, jugando siempre en domingo, siempre con apoyo de un gran porcentaje de los aficionados y también, claro, de los dueños del negocio.