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Lunes, 28 de noviembre de 2005

FúTBOL › BOCA VENCIO 3-1 A UN ESTUDIANTES QUE NO FUE PARA ADELANTE

No le ganó a la suspicacia

En un clima enrarecido, el equipo de Basile logró un triunfo llamativamente sencillo para una etapa decisiva del Apertura. Ya ganaba a los 3 minutos, con un gol de Ledesma, y cuando Bastía empató, en la jugada siguiente volvió a ponerse en ventaja, con un tanto de Palacio. Al gol de Barros Schelotto lo celebraron tanto los visitantes como unos cuantos locales...

Por Ariel Greco “Me parece que el Lobo/ no sale campeón/ porque el Guille/ porque el Guille lo cagó...” El grito de la hinchada de Estudiantes surgió no bien Barros Schelotto anotó el tercer gol de Boca y fue el símbolo de una tarde llena de paradojas y suspicacias en el Bosque platense. Es que a partir del triunfo, primero parcial y luego consumado, de Gimnasia en el Monumental, el clima en el estadio estuvo siempre bastante enrarecido. Para Boca se dio un triunfo sencillo, llamativamente fácil para esta etapa del campeonato y bastante cercano a lo que se podía intuir a partir de las especulaciones de la previa.
El silencio de ambas populares minutos antes del comienzo resultó sugestivo. Apenas unos cantitos anti-River de los de Boca rompió la monotonía. Y ya con el juego iniciado, la primera señal bajó desde la tribuna local: “Aunque ganes o pierdas/ no me importa una mierda...”. Probablemente, los jugadores de Estudiantes hayan entendido el mensaje, más allá de que no tuvieran demasiado tiempo para escucharlo. Es que, en el primer avance de Boca, Palacio desbordó dos veces y habilitó a Ledesma, que llegó solito por el medio, tuvo tiempo para mirar el arco y sacar un derechazo inatajable para Herrera.
Es difícil afirmar que Estudiantes haya ido para atrás, pero sí es seguro que no fue para adelante. El equipo de Burruchaga jugó con el freno de mano puesto. Y todas las circunstancias fortuitas del partido se le dieron en contra: a los tres minutos ya estaba en desventaja. Cuando alcanzó el empate, de inmediato Palacio puso el 2-1. Entonces, en una pelea que no era la suya y con hinchas divididos entre los que querían ganar y los que pretendían perder –hasta festejaron los goles de Boca–, estaba claro que los jugadores platenses no se iban a inmolar por la causa. Y no lo hicieron.
Para Boca todo resultó simple. Dentro de un desarrollo muy light, impuso sus condiciones por la presencia de Battaglia, la movilidad de Insúa y la insistencia y velocidad de Palacio, indetenible para la defensa de Estudiantes. Atrás, por sus propias dudas pasó algún sobresalto, pero los locales apenas sostenían a Calderón como bandera, mientras que Sosa y Carrusca trataban bien la pelota, aunque a 40 metros de Abbondanzieri.
Parecía que el panorama podía modificarse con el gol de cabeza de Bastía tras un centro de la derecha; por lo pronto, cambió en la platea local, donde algunos hinchas no sólo no festejaron el tanto sino que insultaron por ello, lo que provocó peleas. Pero los defensores de Estudiantes se sumaron a las confusiones de sus hinchas –unos salieron al offside, otros se quedaron– y Palacio, absolutamente solo por el medio, definió con un toque suave ante la salida de Herrera para colocar el 2-1.
Si alguien sospechaba por lo ocurrido en el primer tiempo, entonces en el segundo ya no tuvo dudas. Es que Estudiantes no presionó arriba, dejó que Boca manejara la pelota y pareció conformarse con el resultado. Apenas llegó con una corrida y una volea de Calderón y con un remate al primer palo del ingresado Senger. Tranquilo, Boca se tiró atrás y siguió inquietando con Palacio, que mostró otra velocidad respecto de los defensores platenses. Y con muy poquito seguía insinuando mayor peligro que su adversario.
Hasta que, en la mejor jugada colectiva del partido, Insúa habilitó a Guillermo, que definió con un derechazo cruzado y garantizó el triunfo, por si quedaba alguna duda. El partido se terminó adentro de la cancha, pero siguió afuera: los hinchas de Estudiantes se acordaron del Mellizo y de Gimnasia, además de mandar un mensaje a sus rivales de ayer: “Salgan campeones, la p... que los p...”.

ESTUDIANTES-1
Herrera -5
Angeleri -4
Ortiz -5
Alayes -5
Cáceres -4
Braña -5
Bastía- 5
Cardozo -6
Carrusca -6
Sosa -5
Calderón -5
DT: Burruchaga
BOCA-3
Abbondanzieri -6
Calvo -6
Schiavi -4
Díaz -5
Krupoviesa -5
Ledesma -5
Battaglia -7
Bilos- 5
Insúa -6
Palacio -8
B. Schelotto -6
DT: Basile

Estadio: Gimnasia.
Arbitro: Gustavo Bassi
Goles: 2m Ledesma (B); 39m Bastía (E); 41m Palacio (B); 79m Barros Schelotto (B).
Cambios: 60m Senger por Braña (E); 66m Gelabert por Angeleri (E); 88m Marino por Insúa (B) y Delgado por Barros Schelotto (B).

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Palacio aguanta la marca de Ortiz. El de Boca fue la gran figura de la cancha.
 
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