Lionel Messi había arrancado con todo ayer en la victoria 2-1 de Barcelona frente a Atlético de Madrid, al poner en ventaja a su equipo mediante un gol con tres dedos. Sin embargo, cuando el partido se moría, el checo Tomas Ujfalusi le pisó el tobillo derecho, se ganó la roja y le provocó una distensión del ligamento lateral interno, sin afectación ósea. El rosarino se revolcó en el campo de juego, con la cara tomada entre ambas manos y el tobillo visiblemente hinchado, mientras que el cuerpo médico de Barcelona le sacó las medias y los botines. Hoy le realizarán los estudios que determinarán con exactitud el tiempo que le demandará la recuperación, pero se estima que estará inactivo al menos por 15 días.

“Las imágenes hablarán por sí solas. Estamos contentos por la victoria, pero muy tristes por esto”, confesó el técnico Josep Guardiola, al mismo tiempo que ironizó respecto del juego que mostró su rival: “Si el Atlético juega toda la temporada con este nivel de agresividad, por supuesto que puede luchar por la Liga e, incluso, ganarle al Madrid también”. No obstante, el entrenador trató de tranquilizar a los hinchas, al señalar que los médicos ya descartaron que se trate de una fractura. A su vez, el enganche Andrés Iniesta aseguró sentirse “muy triste” y “preocupado” por la lesión de su compañero, mientras que Víctor Valdés culpabilizó duramente al árbitro: “Hay que proteger a este tipo de futbolistas, porque se puede dar pie a una desgracia si se es tan permisivo”.

Si se confirma el período mínimo de 15 días de inactividad, Messi se perderá tres encuentros de la Liga, frente a Sporting de Gijón, Mallorca y Athletic de Bilbao, y uno de la Champions League, ante Rubin Kazan. Más allá del diagnóstico final, la presencia del rosarino en el próximo amistoso del seleccionado argentino, el 8 de octubre ante Japón en Tokio, quedó comprometida. Los japoneses exigían la presencia de Messi en ese amistoso.

Ujfalusi fue a verlo al término del partido, con el objetivo de disculparse por su dura e innecesaria falta y desearle una pronta recuperación. Barcelona bajó al puntero, pero la lesión del rosarino convirtió la alegría en preocupación.