[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

Por Sebastián Fest, desde Barcelona

Gastón Gaudio cerró ayer la mejor semana tenística de su vida al conquistar el primer certamen de su carrera derrotando en la final del torneo de Barcelona al español Albert Costa 6-4, 6-0, 6-2. Una derecha larga del español le dio al tenis argentino el tercer título de la temporada, tras las victorias de Guillermo Cañas en Chennai y de David Nalbandian en Estoril. “Esto es un sueño. Ganar esta semana aquí y los partidos en la Davis son lo mejor que me pasó en mi vida”, confesó emocionado Gaudio, tras dedicarle el título a su madre Marisa, una española de La Coruña radicada en Buenos aires.
Gaudio, de 23 años, culminó así la mejor semana de su vida deportiva, entrenado en forma interina por su compatriota Martín Jaite, que minutos antes del comienzo de la final recibió un premio junto a los otros campeones del certamen, que celebró su 50º aniversario. Campeón en 1987, Jaite era hasta hoy el único argentino que había alzado el trofeo Conde de Godó. Guillermo Vilas, el mejor jugador argentino de todos los tiempos, perdió cuatro finales consecutivas en Barcelona hace dos décadas.
La cancha central del Real Club de Tenis Barcelona congregó a estrellas de la política y el deporte. Desde la tribuna observaron la final la infanta Cristina y su esposo Iñaki Urdangarín. El rey de España, al que se esperaba en el club, no llegó desde el circuito de Montmeló, donde asistió al Grand Prix de Fórmula 1 de España.
El español Pau Gasol, elegido debutante del año en la NBA, arrojó la moneda en el sorteo previo. Parado entre Costa y Gaudio, a los que les sacaba al menos dos cabezas, generó risas entre el público y los jugadores. Gaudio se mostró relajado y confiado desde el inicio. La tribuna tenía un espectador de lujo: su compatriota Javier Saviola, estrella del Fútbol Club Barcelona, con el que conversó por la mañana en el club.
El partido comenzó de forma extraña. Tras jugarse el primer punto, el juego se interrumpió durante varios minutos porque en las colmadas gradas del estadio algunos de los 6 mil espectadores comenzaron a quejarse en las filas superiores de que no podían ver el juego.
“¡Por favor, así no puedo jugar!”, gritaba Costa desde la cancha, mientras se quejaba al juez de silla y al árbitro del torneo. Finalmente, tras quince minutos y salvar cinco break-points, Costa se llevó el primer game.
Pero a partir de entonces Gaudio comenzó a hacer valer su juego, con un concierto de reveses que servían tanto para desatar la admiración del público como para minar las escasas reservas físicas de Costa.
Dos quiebres sobre el servicio del catalán contra uno sobre el del porteño le dieron a Gaudio el primer set en 61 minutos. En el segundo borró de la cancha a Costa por 6-0 en 29 minutos. Tras ser masajeado en su pierna izquierda en la cancha por un asistente médico, Costa regresó para entregar el set final por 6-2 y el partido en dos horas y cuatro minutos.
El argentino cerró así una semana perfecta, ya que no perdió un set en todo el torneo, y derrotó a jugadores del nivel del sueco Thomas Enqvist, el español Carlos Moyá y, ayer, el australiano Lleyton Hewitt, número uno del mundo.
Gaudio ascenderá en forma notable en el ranking mundial de mañana, donde esta semana figura en el puesto 64º. Costa, desgastado por sus duros encuentros antes los españoles Félix Mantilla y Alex Corretja y, ayer, ante el argentino Guillermo Cañas, no pudo alzar por segunda vez el trofeo, que ya había conquistado en 1997.
“Me sentí muy bien durante toda la semana, y trabajar con Martín fue espectacular, aunque mi entrenador sigue siendo Tony Pena, que tiene buena parte de responsabilidad de que yo haya ganado hoy”, dijo Gaudio, derrotado en las finales de Stuttgart 2000 y Viña del Mar 2001. Costa, de26 años, reconoció el nivel de su rival hoy: “Se lo merece, jugó una semana de tenis increíble”.
Cuando se le preguntó a Gaudio cuál fue la clave de su victoria, el argentino no dudó: “La actitud, las ganas que puse. Corrí mucho. Quizás tomé por fin la decisión de ganar un torneo, antes me conformaba inconscientemente con llegar a la final”.
Jaite, a pocos metros, reía recordando anécdotas de la semana que vivió junto a Gaudio. “Gastón no deja de sorprenderme. Ayer, cuando lo estaba controlando a Hewitt, el australiano le ganó un punto. Gastón se dio vuelta y mirando hacia mí dijo: ‘No, si por algo es el número uno, es lógico, no le puedo ganar, qué voy a hacer yo ante él’. Ahora por suerte sabe que puede ganarle a cualquiera”, dijo satisfecho el ex número diez del mundo.
La pareja argentina formada por Lucas Arnold y Gastón Etlis se impuso en la final de dobles del torneo Conde de Godó al dúo formado por el australiano Michael Hill y el checo Daniel Vacek por 6-4 y 6-4. Arnold y Etlis, cabezas de serie número siete, completaron una magnífica actuación, especialmente en semifinales cuando eliminaron a la pareja checa Damm/Suk, por un doble 7-6. La victoria de Arnold y Etlis completa la gran semana argentina en Barcelona.