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La locura que pueden desatar Boca y River en tres clásicos definitorios y sucesivos queda a la vuelta de la esquina y el dinero que puede reportarles semejante serie de play-offs, también. Claro está, primero deberán eliminar en la Copa Libertadores a Cobreloa de Chile y a América de Colombia para, después sí, sacar la calculadora y pensar en el dinero extra que les ingresará a sus tesorerías. Con una diferencia notable: como el equipo de Bianchi jugará dos de los tres partidos como local, recaudará más.
“La Copa nos da más plata”
“En la Copa tenemos pensado sacar más plata que en el clásico del torneo Clausura. Y es que los socios pagan cinco pesos la entrada”, adelantó Roberto Digón, el vicepresidente boquense. Sin embargo, el primer Boca-River, el que puede delinear con más nitidez el desenlace del campeonato local, es por ahora el único que tiene fecha cierta. Se disputará el 1º de junio y las entradas se pondrán a la venta a partir de hoy. En las boleterías boquenses arrancarán con las plateas para socios y mañana también estarán disponibles para los que no tienen carnet. Su valor va de los 60 a los 80 pesos. La recaudación para el clásico made in casa, el premio consuelo si los dos pasan los cuartos de final de la Libertadores, nunca bajaría de los 500 o 600 mil pesos.
Mañana por la noche empezará a conocerse si River y Boca se topan en la Copa. El equipo de Manuel Pellegrini visita al América en Cali y, un día después, el de Bianchi recibe al Cobreloa. Con la clasificación definida en esta instancia, recién ahí quedarán habilitados los nuevos cálculos de ingresos. Las fechas prefijadas de los dos eventuales clásicos por la Libertadores son el 4 y el 18 de junio.
El escenario más deseado
Los dirigentes de ambos clubes se frotan las manos ante este hipotético escenario. Primero, porque cada clásico les garantizaría 200 mil dólares a cada uno por los derechos de televisión –hasta los cuartos de final el cachet asciende hasta 165 mil– y segundo, porque no se salva de pagar nadie. Ni siquiera los socios, como sostiene Digón.
“En River creemos que si nos clasificamos y jugamos la revancha con Boca en el Monumental, podría recaudarse un millón y medio de pesos. Y sólo en concepto de entradas. Los socios, como en Boca, pagarían 5 pesos la popular”, informó el doctor Carlos Ferreyra, presidente del Departamento de Hacienda. En efecto, si se concretara la seguidilla de clásicos, River se aproximaría a Boca en los ingresos porque disputaría el último en Núñez, el más decisivo de todos.
Quienes seguramente están de parabienes con la posibilidad de jugar tan seguido y por los puntos son los patrocinadores. Porque sus productos gozarán de una exposición descomunal en televisión, radio, gráfica e Internet. Una seductora oportunidad de recuperar lo que aportan por temporada con más ventas y sacar dividendos de esa poderosa maquinaria del marketing deportivo que es un River-Boca. Se viene entonces el primer Superclásico del año y, esta vez, podría tener cría. Pero como si eso fuera poco, en su versión copera, pagará doble.