En el año de la Copa del Mundo, el seleccionado argentino de rugby, desplegando una descollante actuación, llegó a las semifinales junto a los otros tres seleccionados que participan del Rugby Championship. Desde el lanzamiento de este torneo del Hemisferio Sur en 2012, Los Pumas aprendieron de las duras derrotas infligidas por Nueva Zelanda, Australia y Sudáfrica. De ahí que con la asistencia técnica de Graham Henry, quien llevó a los All Blacks a obtener la copa mundial en 2011, y sin perder el scrum y la defensa como las armas tradicionales, el neozelandés estimuló a los jugadores a tomar riesgos y a desarrollar un juego moderno y vistoso con distintas variantes de ataque. Así, a la proverbial garra puma, al tackle enarbolado como bandera y a la combatividad de los forwards para someter a los rivales, Los Pumas le agregaron un juego dinámico y abierto que aprovecha la habilidad y la explosión de los backs. Algunos números ilustran el rendimiento del plantel en el Mundial: 27 tries, sólo atrás de los finalistas; 250 puntos en siete encuentros, únicamente los All Blacks, que terminaron campeones, marcaron más; segundos en la cantidad de penales convertidos; 4414 metros recorridos y 984 corridas realizadas, la mayor cantidad en la copa. Estos datos, entre otros, demuestran la vocación ofensiva del equipo dirigido técnicamente por Daniel Hourcade. Precisamente fue el coach tucumano el que armó esta mezcla exitosa sobre la base de Pampas XV –el equipo que ganó invicto la Vodacom Cup en 2011, en Sudáfrica, y la Pacific Rugby Cup, en 2014 y 2015, también sin ceder ningún partido– más la experiencia aportada por los jugadores que la rompían en los clubes europeos.

Sin embargo, atrás quedó el cuarto puesto en el Mundial de Rugby, y nuevos desafíos se le presentan al rugby nacional: el 26 de febrero, una nueva franquicia, Los Jaguares, se estrenará en el Super Rugby, el campeonato profesional de rugby más importante del Hemisferio Sur, integrado por equipos de Nueva Zelanda, Sudáfrica, Australia y, a partir de 2016, con equipos de Argentina y Japón. En la “NBA del rugby”, según la definición de Agustín Pichot, “lo único que pueden hacer los Pumas es mejorar, seguir mejorando”.