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Por A.D.B.

Más allá de que Coria obtuvo la Copa Ericsson en el 2000, el cuarto jugador del planeta aclaró que este título ATP lo soñó “desde siempre. Es muy lindo ganar acá, con la gente de mi país”. Entre ese público también estaba su flamante esposa, Carla, que siguió el partido desde uno de los palcos. “Se lo quiero dedicar a mi señora, porque es el primer título de casado; y también a mis amigos de Venado Tuerto. Espero poder repetir el año que viene”. Más tarde, cuando en la conferencia de prensa le recordaron que era el primer argentino en ganar este torneo, Coria reconoció que “no lo sabía, es una alegría enorme. Esto nunca me lo voy a olvidar”. Con relación a lo que sucedió en la cancha, Coria señaló que “sabía que iba a ser difícil, pero entré diferente a la final del año pasado. En este caso llegué diez puntos físicamente, y con mucho hambre de ganar”.
Luego de felicitar a Moyá “porque es un ejemplo, luchó mucho con su tobillo e hizo un esfuerzo enorme”, Coria aprovechó para responder a las versiones que circularon el año pasado, que hablaban de supuestas peleas entre los jugadores del equipo argentino de Copa Davis. “Nunca dejamos a nuestro país de lado, eso de las peleas son estupideces y me dolieron mucho. Todos queremos ganar la Davis.”
Por su parte, Moyá destacó que sabía “que tarde o temprano podía perder aquí. Pero él estuvo muy sólido, muy firme durante toda la semana, y soportó bien la presión de jugar como local”.