Buffon: No tuvo demasiado trabajo durante la final, pero contuvo dos pelotas clave en el juego. Primero, un derechazo cruzado de Henry en el primer palo y luego un cabezazo de Zidane, en el suplementario.

Zambrotta: Jugó condicionado por una rápida amonestación. Estuvo seguro en la marca, aunque en un cruce pareció cometerle penal a Malouda. Luego no pasó sobresaltos, pero tampoco pesó en ataque.

Cannavaro: Otro partido de alto nivel del capitán italiano en su centésimo juego internacional. Cruzó con solvencia, impuso presencia y dominó en casi todos los mano a mano. Pieza clave.

Materazzi: Participó en casi todas las jugadas trascendentes del encuentro. Se lo llevó puesto a Malouda en el penal, le ganó en el salto a Vieira y convirtió el gol de cabeza, y provocó a Zidane para la expulsión.

Grosso: Más contenido que en otros partidos, le terminó ganando el duelo a Ribery. Sólido por abajo y seguro por arriba. Convirtió con mucha solvencia el penal decisivo para el título.

Camoranesi: Mucho ida y vuelta, pero poca productividad. No pesó en el juego por la derecha, ni tampoco lo hizo cuando lo mandaron a la izquierda. Terminó reemplazado por Del Piero.

Gattuso: En un partido más de combate que bien jugado se sintió muy cómodo y demostró su importancia en la recuperación. Más allá de alguna jugada aislada, controló bien a Zidane, sin faltas.

Pirlo: Como a lo largo del torneo, fue el conductor del equipo. Clarificó siempre, jugó la pelota a un destinatario seguro y envió el corner en el gol de Materazzi. De lo mejor del equipo campeón.

Perrotta: Un partido muy parecido al de Camoranesi, aunque con un poco más de obligaciones defensivas. Sin salirse del libreto, terminó completando una actuación discreta, sin demasiadas luces.

Totti: Lejos de su mejor versión, el talentoso jugador de la Roma pasó inadvertido en la noche berlinesa. Muy lejos del arco, con poca compañía, ni siquiera lo salvó su buena pegada. Se fue reemplazado.

Toni: Luchó de manera incansable, siempre en inferioridad de condiciones frente a sus marcadores. Pudo marcar con una palomita bárbara, pero le anularon el tanto por offside. Cumplió su función.

Iaquinta: Esta vez no aportó el cambio de ritmo que había mostrado ante Alemania. No tuvo incidencia en el partido.

De Rossi: Llegó a auxiliar a la mitad de la cancha cuando Italia ya veía con buenos ojos el empate.

Del Piero: Entró a volantear a la izquierda y su participación fue escasa. Ya a esa altura Italia casi no atacaba.