“Creo que Rusia fue un justo campeón; pero también estoy seguro de que estuvimos muy cerca. La diferencia apenas se hizo con algunos puntos, en cada set, que ganaron ellos.” Pese al dolor por la ajustada derrota en la final, el capitán del equipo argentino de Copa Davis, Alberto Mancini, hizo un balance positivo de lo vivido en Moscú: “Estuvimos a punto de ganarla. Fue una buena Copa Davis”, aseguró Mancini, que no se sorprendió por el desarrollo de la serie.

“Se dio estratégicamente como lo habíamos planeado, con un 2-2 para definir en el quinto punto. En mi cabeza tenía ese desarrollo. Hoy, en el cuarto set, Marat (Safin) estaba cansado, y Chucho (Acasuso) estaba fresco. Volver de 2-1 abajo en un tercer día no es fácil, y nosotros casi lo logramos.”

“Si se ganaba el cuarto set, (la final) estaba un poco más para nosotros que para ellos”, insistió Mancini, analizando la derrota de Acasuso ante Safin. “La sorpresa fue perder el dobles de la manera en que lo hicimos”, admitió Mancini. “Fue una gran sorpresa para nosotros la forma en que perdimos”, insistió. “Pero confiábamos en que podíamos ganar los dos puntos.”

Mancini dijo haber optado por Acasuso en lugar de Juan Chela, nominado inicialmente, porque el jugador estaba “fresco” y su estilo se adaptaba “al juego de Marat”.

“El dobles fue la clave de la final”, reconoció el capitán. “De haberlo ganado habríamos tenido casi el 80 por ciento de la serie ganada”, dijo antes de recalcar el “orgullo” que siente por sus jugadores. “Chucho jugó como un grande, de una manera increíble en el partido más importante de la historia del tenis argentino. Cuando perdés como ayer (por el sábado) en el dobles es un cachetazo, casi no te das cuenta. Hoy, en cambio, es mucho más duro.”

“Obviamente, nervios siempre hay y es lógico: cada vez que vas a jugar un partido, y más en una Copa Davis y que representás a tu país, es sentir nervios y ansiedad”, admitió Acasuso. “Por otro lado, hay un sabor de contento sabiendo que dejamos todo para ganar. En la medida en que vaya pasando el tiempo, nos daremos cuenta realmente de lo que jugamos y lo que vivimos”, señaló el misionero. E insistió: “Hay veces que toca perder y a nosotros nos tocó perder; pero como dijo todo el equipo antes de empezar esta serie: si toca perder, volveremos al país con la frente alta. Creo que vamos a volver de esa manera”.

Respecto del quinto punto, afirmó que “Safin jugó en un gran nivel. Yo perdí el cuarto set en el tie-break, así que me voy satisfecho. Es más: estimo que de haber ido al quinto set, tenía mas resto que él”.

“Intenté no pensar lo que estaba jugando. Jamás me temblaron las piernas, sólo me critico no haber estado más fino con la devolución en el cuarto set para quebrarle el saque a Marat”, resaltó el misionero.

En tanto, Nalbandian, quien había igualado bien temprano la serie en dos, subrayó: “Jugué realmente muy bien. Lo mantuve casi siempre en el fondo, jugamos al ritmo que yo pretendía, excepto en el final del tercer set y en el comienzo del cuarto”.

El cordobés estimó que “tal vez en los dos primeros sets, Davydenko jugó mal porque tenía la presión de ganar en su casa y definir la serie. Está pasando por un gran momento. Está tres del mundo, pero la Davis es diferente y quizás eso le jugó en contra”.

Mancini insinuó que quiere seguir en el 2007 como capitán del equipo, aunque por momentos fue ambiguo: “Yo estoy muy bien, me siento cómodo. Tenemos que sentarnos, replantearnos cosas y empezar un nuevo proceso. Yo tengo la voluntad, pero siempre hay cosas en las que hay que evolucionar”.

Tampoco hizo mayores precisiones en cuanto a la posibilidad de que David Nalbandian renuncie al equipo para el 2007. “Todavía no lo podemos hablar hoy. Tenemos que volver a juntarnos y replantearnos cosas.”