El entrenador de Independiente, Américo Gallego, asumió toda la responsabilidad por la caída que sufrió su equipo ante Banfield, al atribuirse errores decisivos en los cambios. Sin embargo, relativizó la derrota, ya que aseguró que su equipo igual será el campeón.
“La derrota es mía, me equivoqué en los cambios”, aseguró Gallego tras el partido. “Igual, en la semana podemos cambiar lo mal que jugó el equipo. Nos queda una alternativa en el partido con Boca. Perdimos tres puntos importantes. No jugamos bien”, admitió el técnico, que se lamentó por ocasiones desperdiciadas cuando Independiente ganaba 1-0 y por los errores defensivos que le significaron la derrota. “Si uno quiere salir campeón, tiene que cuidar mucho los detalles. Nos hicieron un gol de pelota parada y después nos metimos atrás, ése fue un error”, comentó Gallego.
Claro que a pesar de que la derrota del puntero le dio posibilidades a Boca, Gallego intentó llevar un mensaje optimista a sus jugadores y a los hinchas. “Nos tenemos mucha fe, hay que ganarle a Boca para salir campeón y es lo mejor que nos puede pasar”, señaló el entrenador, que dijo que “nunca” pensó que la diferencia sobre Boca sería ahora de sólo de “tres puntos”. De todos modos, aseveró: “Nunca tengo miedo. Vamos a ganar el domingo y a salir campeones. Yo quería salir campeón hoy, pero habrá que jugarse la vida en Avellaneda”, indicó el entrenador del puntero.
Más allá del mensaje alentador que trató de expresar Gallego, los jugadores de Independiente admitieron que la derrota los golpeó duro. “Sin dudas, tenemos que mejorar para mantener la ventaja con Boca y seguir pensando que podemos ser campeones”, comentó Diego Castagno Suárez. Por su parte, el capitán Gabriel Milito confesó que el plantel quedó herido con la caída. “No jugamos bien, nada más. No hace falta hacer un análisis profundo. Estamos heridos, por lo que el domingo, ante Boca, cada uno tendrá que sacar el fuego sagrado porque será a matar o morir”, comentó el principal referente de Independiente.