Esta de Junín terminó siendo, a una semana de las elecciones primarias, una auténtica carrera política, ante aproximadamente unas 50 mil personas. El ministro del Interior, Florencio Randazzo, llegó al autódromo cerca de las 11 junto al gobernador de la provincia, Daniel Scioli: en el playón de boxes se dispusieron trailers para poder gestionar el nuevo DNI y el pasaporte. Luego, Scioli y Randazzo cortaron las cintas de inauguración del Eusebio Marcilla. La provincia aportó uno de los 25 millones que costó el autódromo; el gobierno nacional, a través del Ministerio de Planificación, contribuyó con 6 millones de pesos.

Uno de los competidores de Scioli, el intendente de José C. Paz y precandidato a la gobernación bonaerense, Mario Ishii, se paseó desde temprano por los boxes, con su poncho y rodeado de promotoras. El Torino de Diego Ponte llevó pintada en la cola la inscripción “Ishii gobernador, Cristina presidenta”, pero fue uno de los cuatro autos que no vio la bandera a cuadros.

Tampoco se perdió la chance de hacer proselitismo Francisco de Narváez, quien suele visitar el TC en campaña electoral, como hizo en 2009. Al candidato a gobernador por la alianza Udeso lo acompañó José “Pepe” Scioli, ex piloto de Turismo Nacional y hermano del actual gobernador, del que se distanció políticamente un año atrás para competir por una senaduría, en la lista del Colorado.