Ardiles vs. Madorrán
Por Ariel Greco
Osvaldo Ardiles vivió una tarde a mil. De arranque recibió una ovación por parte de los hinchas, luego protestó de manera constante los fallos del árbitro, más tarde sufrió su primera expulsión como técnico en la Argentina y por último le pegó durísimo a Fabián Madorrán por su tarea en el encuentro de ayer. Lo que se dice una tarde completita.
Cuando el chileno Milovan Mirosevic anotó el primer gol de Racing, el cantito surgió desde la popular y no tardó en propagarse en el resto del estadio: “De la mano de Merlo.../ salimos campeón.../ con Ardiles.../ no paramos hasta Japón...”. Ni bien lo escuchó, el técnico miró a sus colaboradores y esbozó una sonrisa cómplice. Seguro que por su cabeza se cruzaron los momentos duros que atravesó en el club y los duros cuestionamientos que le hicieron los hinchas hasta no hace mucho tiempo.
Pero cuando todo pintaba tranquilo para Ardiles, surgió la figura de Madorrán para amargarle la tarde. Primero pitó un penal que aparentemente no existió y luego cargó de amarillas a todo el fondo de Racing, mientras que de Central sólo amonestó a Horacio Carbonari, y encima cuando terminaba el partido. Ante ese panorama, las protestas del entrenador no se hicieron esperar. Por eso, faltando quince minutos, Madorrán se hartó de los gritos de Ardiles y lo echó de la cancha. En ese momento, el técnico recibió otra nueva muestra de cariño, ya que la hinchada lo ovacionó cuando se retiraba al vestuario.
Ya en la conferencia de prensa, pese a su habitual serenidad y mesura, Ardiles se despachó a gusto contra Madorrán. “El arbitraje fue lamentable. Me hubiese gustado jugar el partido bajo otras condiciones, porque la tarea del juez nos perjudicó mucho. Es realmente una pena”, remarcó el entrenador, que además calificó al empate como un buen resultado por la incidencia que tuvo el árbitro en el desarrollo del juego. “El empate es un buen resultado, porque con este arbitraje deberíamos haber perdido”, comentó con ironía. Y hasta cuando elogió la tarea de sus dirigidos tuvo tiempo para pegarle a Madorrán. “Estoy contento con lo que hicieron los jugadores, porque se impusieron a la presión que significa que se saquen montones de tarjetas amarillas y ninguno de ellos sea expulsado”, dijo el entrenador.