Si pocas semanas atrás esta sección se inquietaba al presentar la peculiar decisión hollywoodense de dar luz verde a un venidero film animado de emojis al justificadamente alarmista son de “el mundo, en efecto, se ha vuelto un sitio un poco peor”, hoy es posible anunciar que el apocalipsis fílmico ha arribado. La bestia de diez cuernos y siete cabezas, sin embargo, llega con forma ligeramente distinta: la de los caramelos PEZ, más famosos por sus dispensadores que por sus pastillas con forma cuasi rectangular y sus sabores frutales de fresa, manzana, limón, sandía, entre otros. Creados hace casi 90 años por el austríaco Edyard Hass (por entonces, solo de menta y sin el tan característico embalaje), los PEZ (acrónimo del término “Pfefferminz”) llevan décadas recorriendo países con sus cabezas montadas de cuanto personaje icónico de la cultura pop venga a la mente: desde Mickey Mouse y Pedro Picapiedra, los bobalicones Minions o el oscuro Batman, Santa Claus y los Pitufos, hasta los protagonistas de Star Wars o Piratas del Caribe. Y si bien ya habían inspirado un documental intitulado PEZheads (2006), sobre el fenómeno perenne y la extraña adicción de sus coleccionistas (hace pocos años, sin más, alguien pagó 13 mil dólares –el precio más alto registrado– por una versión limitada con cabeza de burro), pocos podían prever que los adminículos acabasen estelarizando una ficción.

Por supuesto, será una película apta para todo público, a decir de Envision Media Arts (EMA), la productora detrás del proyecto. Y, muy factiblemente, tendrá trama edulcorada. “Los caramelos PEZ son muy queridos por niños y adultos por igual, así que junto a Cameron Fay, guionista del proyecto, hemos creado un mundo único para PEZ y una historia que tocará el corazón de mucha gente”, adelantó Lee Nelson, de EMA. Por lo demás, se sabe que Gregg Rossen, Jonathan Hung, Brian Sawyer y David Tish serán parte del equipo de productores ejecutivos. Se sabe también que el film LEGO abrió una puerta mefistofélica que prontísimo debería ser cerrada. ¿Quién lo hubiera dicho? El film emoji comienza a parecer infinitamente más interesante...