No alcanza con natación, ciclismo, boxeo o badminton, no: para la Federación de Granjeros de Nueva Zelanda, la esquila de ovejas debería ser incluida como modalidad deportiva de los Juegos Olímpicos. “Puedo testificar sobre el esfuerzo físico que implica”, ofreció su vocera, Jeanette Maxwell, sobre el pedido de la asociación de Oceanía. Es que, por su potencial como práctica de exhibición, los granjeros creen que es hora de darle su reconocimiento e integrarlo a los Juegos de la Mancomunidad de Naciones y, por supuesto, las Olimpíadas.

“Ya es tiempo de darle a la esquila el estatus internacional que merece”, aseguró Maxwell y enfatizó el estado atlético de los mejores esquiladores. ¿Quiénes? Pues, el irlandés Ivan Scott, dueño del record mundial masculino, con 749 ovejas peladas en ocho horas y la neocelandesa Kerri-Jo Huia, con 507 para el top femenino. Si se considera que correr una maratón lleva un promedio de cuatro horas, hay quienes argumentan que el esfuerzo granjero duplica en resistencia.

Aunque una petición similar fue sugerida en 2008 por la agrupación Sports Shear Australia y desestimada por la Comisión Deportiva del país, los deportistas de la lana hacen caso omiso e insisten. Y, para no perder el ritmo, continúan ejercitando. Al fin y al cabo, en marzo tendrán oportunidad de mostrar su talento, cuando celebren el Campeonato Mundial de Esquila, en la localidad de Masterton, donde cada participante tendrá cerca de 700 ovejitas listas para ser desmechadas.