Miércoles, 2 de enero de 2008 | Hoy
No sería otro que el propio sueldo del gobernador, estimado
en 8 mil pesos. "No puede ser que un director de Aguas
Santafesinas gane 18 mil pesos", dijo el ministro Bonfatti.
Desde Santa Fe
El ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Antonio Bonfatti, anunció que impulsará un "sinceramiento" de la escala salarial que paga la provincia a sus trabajadores, con lo cual las negociaciones paritarias con los gremios UPCN, ATE y Amsafé que comenzarían en febrero pueden traer dos novedades: la decisión de Hermes Binner de poner un tope a la grilla de salarios públicos que no sería otro que el propio sueldo del gobernador que hoy ronda los 8 mil pesos y una "cláusula gatillo" de actualización de los salarios estatales que acompañe a la inflación y a los ingresos fiscales, a través de una fórmula polinómica, dijo el funcionario. "Hay que regularizar situaciones y terminar con hipocresías porque no puede ser que un director de Aguas Santafesinas SA (Assa) gane hoy 18 mil pesos, más el auto y el teléfono, mientras un gobernador orilla los 8 mil. A mi criterio debe establecerse una asignación al gobernador como patrón, que sea la máxima de la provincia, y a partir de allí una escala descendente. Esto hay que sincerarlo", afirmó Bonfatti.
Hasta ahora, las discusiones paritarias con los gremios del Estado dejaron al margen el sueldo de los funcionarios políticos y ni siquiera se acercaron a la posibilidad de una cláusula de reajuste salarial, como la que sugirió el ministro.
"¿Cuánto debe ganar un gobernador?", se planteó Bonfatti en un diálogo con la colega Ivana Fux. La pregunta sirvió de disparador del anuncio: el gobierno de Binner pretende ordenar la grilla de salarios que paga la provincia a sus empleados, pero también a los funcionarios políticos. Es que hoy el sueldo del gobernador no es el más alto, funcionarios de rango inferior lo superan, y con creces, como ocurre en el caso que
reveló Bonfatti: un director de la empresa de Aguas cobra 18 mil pesos por mes, es decir 10 mil pesos más que Binner. La asignación del mandatario también está muy por debajo de lo que ganan los ministros de la Corte Suprema de Justicia de la provincia y los vocales del Tribunal de Cuentas, que superan los 15 mil pesos mensuales.
"Esto es una cosa que se debe esclarecer a mi criterio", dijo Bonfatti, al insistir en la necesidad de fijar "un salario al gobernador y que éste sea el máximo de la escala que paga la provincia". Una forma de evitar lo que sucede muchas veces, que los sueldos de funcionarios de menor rango aumentan con excesivos viáticos y gastos de representación. "Estas cosas hay que sincerarlas", opinó.
"Creo que hay que regularizar situaciones y no entrar en hipocresías, porque un director de Assa no puede ganar 18 mil pesos, más el auto y el teléfono, mientras un gobernador orilla los 8 mil. A mi criterio, debe establecerse una asignación al gobernador como patrón, que sea la máxima de la provincia. Y después, una escala descendente que, a su vez, permita contratar a los mejores profesionales, porque no es fácil encontrar gente formada que pierda dinero respecto de lo que venían ganando con 20 o 30 años de profesión. Esto hay que sincerarlo", reiteró el ministro.
Bonfatti dijo que el tema es materia de conversaciones con los gremios estatales. "Ya lo hemos charlado particularmente con (dirigentes de) UPCN y están totalmente de acuerdo. Y esto no significa que estemos disparando una escalada salarial", advirtió.
La otra novedad es una cláusula de reajuste de salarios que acompañe la inflación y los ingresos fiscales. El ministro ratificó que en febrero discutirán con los gremios una actualización salarial para los trabajadores públicos a partir de nuevos criterios. "Trataremos de establecer una cláusula gatillo para que en la medida en que la inflación suba, crezca el salario de los empleados, atado también a los ingresos de la provincia, a través de una polinómica. Creo que de esa forma, lograríamos una relación menos tensa y aliviaría enormemente una discusión que no es agradable para nadie", explicó.
El ministro ensayó otras definiciones:
*Desburocratizar. "La burocracia es normal en todo Estado, pero tenemos que suprimir los pasos innecesarios que estén por normativas o por usos y costumbres", dijo Bonfatti. Pero para acortar los trámites de los expedientes tendrá que estudiar cada proceso de trabajo en cada área. Para eso, el ministro piensa armas un equipo multidisciplinario de profesionales que esta semana comenzará por Municipios y Comunas, a analizar problema por problema. "Habrá abogados que conozcan la normativa, ingenieros en sistema que diseñen procesos rápidos, y arquitectos que verifiquen los espacios físicos", anticipó.
*Descentralizar. "Hoy tenemos una cultura donde el Estado se mueve por demandas", dijo Bonfatti. "Nosotros tenemos que ir a un Estado de ofertas, que debe definir con mucha claridad un plan estratégico para cada región. Y no es un plan que se elabore en una mesa entre diez iluminados o pícaros; es todo el Estado y la sociedad civil en la misma mesa pretendiendo definir qué queremos para cada región con una mirada a 20 años desde lo económico, productivo, social, institucional, físico, ambiental. Definir qué es lo que se pretende y en función de ello, cuáles son las acciones que debe resolver el Estado y la sociedad civil en función de esa meta. De allí surgirá el plan de gobierno", concluyó.
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