Quedó desierto el llamado a concurso interno para la incorporación de nuevos inspectores de higiene y seguridad del Ministerio de Trabajo, y se demoran los ingresos prometidos para controlar obras. Hoy, la provincia lanza el concurso abierto, y la inscripción cierra el 29 de agosto. "Es urgente que se sumen estos agentes", pidió el normalizador de la Unión de Trabajadores de la Construcción (UOCRA), Carlos Vergara, quien festejó que "se empiece a hacer algo" para mejorar la seguridad, pero se quejó de los tiempos. Luego de pasar por todas las etapas necesarias de la normativa vigente, a fines de septiembre los siete nuevos inspectores estarían en la calle. Además, la cartera laboral está terminando el pre proyecto que llegará a la Legislatura entre este mes y el próximo, para crear 40 cargos más de inspectores que se incorporarían en 2012, tal como anunció el ministro Carlos Rodríguez, en julio pasado. "Esperamos que la oposición apoye esta iniciativa, porque ya fue rechazada en 2010", se esperanzaron desde el área. Además, en menos de un mes, la UOCRA escrachó 12 obras que no cumplían con las medidas de seguridad.

La subsecretaria provincial de Coordinación para Trabajo Decente del Ministerio de Trabajo, María Teresa Sappa, indicó a Rosario/12 que la semana pasada quedó desierta la convocatoria interna, y "a toda velocidad" salió la resolución para el llamado a convocatoria abierta, que se lanza hoy. Sucede que la falta de postulantes en la primera etapa hace que necesariamente haya que llamar a concurso abierto, y eso juega con los tiempos y las exigencias del gremio.

La incorporación de siete nuevos inspectores destinados a controlar la seguridad en las obras en constricción fue anunciada por Rodríguez hace un mes, días después de la seguidilla de cinco muertes, en menos de treinta días, por los mal llamados accidentes laborales en obras. En una reunión con los representantes de empresas constructoras y dirigentes del gremio que nuclea a los obreros, el ministro aseguró que para 2012 habrá más de 30 nuevos agentes. La idea es que el pre proyecto llegue a la Legislatura en los próximos meses.

Actualmente, la zona de Rosario cuanta con 12 inspectores --desde 2009--, y otros tantos se sumarán a fines del mes que viene, con el llamado a concurso para incorporar siete especialistas en todo el territorio santafesino. Sappa indicó que tras el período de inscripción, hay que seguir un cronograma que se hizo "lo más ajustado posible", en cuanto a los tiempos de evaluación de los postulantes. "A fines de agosto cierra el llamado, y los inspectores estarían incorporados a fines de septiembre", especificó.

Durante todo ese mes, el ministerio debe cumplir con cuatro etapas: "La evaluación de antecedentes, la prueba escrita, el examen psicofísico y la entrevista final", detalló Sappa.

Por otro lado, la funcionaria se refirió al pre proyecto para incorporación de nuevos agentes de control laboral, en 2012. "Estamos elaborando el presupuesto, porque vamos a pedir 40 cargos para el área de higiene de seguridad, y otros 20 para inspección general. La necesidad de estos cargos significa que también sea necesaria la incorporación de personal administrativo", indicó.

Sappa señaló que el pre proyecto deberá enviarse en los próximos días al Ministerio de Gobierno y Reforma del Estado, para que luego el Ejecutivo provincial lo eleve a la Legislatura. "Esperamos que la oposición lo apruebe, porque no lo hizo en los últimos dos años, y ya tienen que estar para el año que viene", apuntó.

Por su parte, Vergara aseguró que es "una buena noticia" el llamado a cubrir esos cargos, ante la "urgencia" que estos significan para poder tener mayores controles de las medidas de seguridad e higiene en las cientos de obras en construcción que tiene Rosario. De todos modos, lamentó que el proceso no pueda ser más rápido. "Lo que hay que saber para controlar estos trabajos son cinco o seis puntos principales que tiene que ver con el cuidado del trabajador", apuntó.

Al mismo tiempo, aseguró que después de la seguidilla de muertes, "los empresarios están siendo más cuidadosos, pero lo importante es que no lo hagan por miedo a una suspensión o a una clausura, sino porque realmente les importa la vida de los trabajadores contratados, y que se cumplan las medidas impuestas".