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En la recta final de la campaña, el socialista Juan Carlos Zabalza afirmó que los candidatos del Frente Amplio Progresista no son "opositores viscerales al gobierno nacional, sino opositores programáticos". Pero marcó diferencias con el modelo kirchnerista al afirmar que "construye con los mismos disvalores del duhaldismo, esperando detrás de un líder, porque el PJ no tiene en su matriz la transformación de la sociedad". El primer candidato a diputado nacional por el FAP admitió que será "difícil" ganarle al Frente para la Victoria en la provincia de Santa Fe, pero aseguró que Hermes Binner aquí achicó diferencias desde las primarias y "está un punto por debajo de Cristina".

--¿Cuál es la diferencia entre el FAP y el FpV, si ambos postulan un Estado presente, garante de derechos, con primacía de la política sobre la economía?- preguntó Rosario/12.

--Somos cualitativamente distintos a lo que hace el kirchnerismo en la Nación. Está demostrado en Rosario y en Santa Fe, y lo pusimos a consideración de la sociedad. Abogamos por una participación del Estado en la economía, pero un estado eficiente, transparente y democrático. El kirchnerismo no cultiva el mejoramiento de la democracia. No hizo un solo hecho de política de descentralización ni ampliación de participación ciudadana. Compartimos el programa Asignación Universal por Hijo, pero queremos esas políticas públicas en salud, vivienda y trabajo, con un sentido federal, discutidas con el resto de las provincias.

--¿Cómo juzga los logros en materia social y económica que expone el gobierno?

--A ver, mientras haya la desigualdad que hay en el país, no veo que haya una transformación. Eso no está en la matriz del PJ. En perspectiva histórica, una cosa fue el '45, pero hoy no pasa eso. No hay diferencia en el modo de construir que el kirchnerismo demuestra con la forma de construir del duhaldismo en la provincia de Buenos Aires. Kirchner al principio planteaba construir por afuera del PJ y terminó atrapado por esa estructura. Esa es la matriz política que no compartimos, que privilegia el líder sobrehumano que hace las cosas. No soy gorila ni le temo a ese apelativo, pero yo creo en lo colectivo como vía de construcción social.

--¿Sigue siendo un objetivo del FAP ganarle al FpV en Santa Fe?

--Sería positivo alcanzar ese objetivo; sé que es difícil. Igualmente, estamos a menos de un punto por debajo de Cristina, según una encuesta nuestra. Desde las primarias, Binner subió 3 puntos y la Presidenta bajó 1 y medio.

--¿Si la reelección de CFK es un hecho, considera la posibilidad de que haya un voto "compensador" que corte boleta y favorezca la lista de diputados del FAP?

--No, de ninguna manera. Hoy las candidaturas a diputados nacionales están atadas a la propia fortaleza de las candidaturas presidenciales, tanto en el FpV como en el FAP. La campaña de ellos también se pegó a Cristina.

--Admite que a nivel presidencial la pelea es por el segundo puesto.

--Es parte de una realidad que nos toca transitar. Nunca los procesos de transformación son rápidos. Hoy Argentina está mejor que en 2002, por eso integramos el FAP y definimos ciertas bases programáticas que consideramos realmente progresistas.

--El kirchnerismo considera que hoy el progresismo pasa por su espacio.

--Tengo la convicción profunda de que no. Por ejemplo, existe un nivel tan alto de desigualdad porque, entre otras cosas, este gobierno nacional y sus legisladores no hicieron ni un mínimo esbozo o planteo para cambiar políticas impositivas que propicien un cambio estructural de condiciones. Seguimos atados al mismo esquema de siempre. Si fueran realmente progresistas, en estos años habrían avanzado en esa dirección y no lo hicieron.

--¿Por qué la Presidenta, según las encuestas, estaría consiguiendo más votos que en las primarias de agosto?

--No tengo esos números, pero creo que hay una instalación muy fuerte de la gestión en este momento. La gente vota de acuerdo a lo que le toca vivir. Nosotros tenemos la obligación de decir responsablemente cómo vemos las cosas.

--En las primarias ustedes decían que Binner no había tenido tiempo suficiente para hacerse conocer ante el electorado nacional. Ahora pasaron dos meses, pero las encuestas siguen ubicándolo abajo del 20 por ciento y a CFK encima del 50%. ¿Qué pasó?

--Crecer del 10 por ciento al 20 por ciento implicaría hacerlo al 100% en un tiempo escaso. Pero hoy en Argentina la inmensa mayoría sabe que en Santa Fe hay un gobierno que actúa y piensa distinto, con valores de solidaridad, participación y transparencia. Binner está construyendo una alternativa política con los valores que expresa el FAP, y lo seguirá haciendo. Es uno de los pocos dirigentes que sigue siendo un ejemplo a imitar.

--En las últimas semanas el discurso del FAP buscó desmentir a Alfonsín, Rodríguez Saá y Carrió, quienes califican a Binner como funcional al gobierno. ¿Evalúan ustedes que así pueden espantar algún voto que no es anti K y que ya habían ganado?

--Lo que hizo Binner fue decirle públicamente a la Presidenta lo que pensamos sobre la realidad del país. Lo que pasa es que hay un equipo de gobierno no acostumbrado a discutir, que no se banca el disenso. Los agravios a Binner en el montaje de los actos nacionales en Santa Fe es una expresión de eso. Por otro lado, no somos opositores viscerales, somos opositores programáticos. Hemos votado cosas de este gobierno y pagamos el precio por eso. Pero debemos marcar diferencias. No vamos a hacer una oposición visceral.

--¿Se anima a pronosticar que Antonio Riestra, quinto candidato en su lista, accederá a una de las diez bancas en juego?

--Deseo fervientemente que lo logremos. Creo que tiene muchas posibilidades, pero no soy pronosticador.