Jueves, 15 de junio de 2006 | Hoy
SANTA FE › SIGUE EL ESCANDALO DE LA SECCIONAL 11º
Las denuncias sobre malos tratos, golpes y vejámenes contra un grupo de jóvenes detenidos en esa seccional policial, llegó ayer al Concejo. La jefa policial prometió investigar.
La jefa de la Policía de Santa Fe, Leyla Perazzo, prometió ayer investigar "en profundidad" la denuncia de una veintena de chicos sobre presuntos apremios ilegales de parte de agentes policiales de la comisaría 11ª tras una gresca iniciada en una unidad del transporte urbano. Al mismo tiempo, la máxima autoridad policial de la provincia dijo que de comprobarse la verosimilitud de las acusaciones "sería aberrante". Perazzo se esmeró en diferenciar lo sucedido en el colectivo -donde resultó gravemente herido un policía- de los supuestos vejámenes que se atribuyen al personal de seccional ubicada en la zona sur. El policía agredido, que continúa internado, negó haber subido al micro ebrio y desmintió haber utilizado su arma reglamentaria, como denunciaron los jóvenes.
"Tengo una percepción de dos problemáticas distintas, el hecho delictivo donde aparece un policía gravemente lesionado, con un coágulo en el cerebro, de las que resultan imputados menores y mayores de edades. Por otro lado, están las denuncias que han aparecido en los medios, que Asuntos Internos me comunicará las diligencias (realizadas) ante la Justicia", comentó Perazzo en diálogo con Radio Dos.
En este sentido, la jefa policial dijo que si las denuncias son tal cual expresan los chicos sería "aberrante" y agregó: "Hay que investigar en profundidad porque no se puede malograr el accionar policial ante lo que pasó en el colectivo" de la línea 142.
El agente agredido, Rafael Ojeda tiene 21 años y hace seis meses que ingresó a la fuerza policial prestando servicios en la seccional 29º. Las agresiones le produjeron hundimiento y fractura de cráneo por lo que fue operado en el CER del Sanatorio Parque. Tiene lesiones en la cara, espalda garganta, cuello y dolencias en gran parte del cuerpo.
A pesar de que los menores aseguraron que el policía estaba alcoholizado y habría disparado varias veces su arma, Ojeda negó rotundamente estas acusaciones. "No estaba borracho porque iba manejando mi propio auto y no usé el arma a pesar de que la tenía conmigo", aseguró.
Ojeda dijo recordar poco de lo sucedido ya que como consecuencia de un botellazo recibido perdió el conocimiento. "No sé muy bien que pasó, solamente me acuerdo que paré mi auto par ayudar al colectivero para que pueda seguir su trayecto tranquilamente y empecé a pedir a algunos chicos que paguen boleto. Después, recibí golpes hasta que me desmayé", relató.
El agente policial recibió la visita del subsecretario de Derechos Humanos de la provincia, Alfredo Vivono, quién se interesó por su estado de salud. "Sigo sosteniendo que estamos ante dos hechos diferentes que deben ser investigados por separado", afirmó el funcionario refiriéndose a las agresiones en el colectivo y a los apremios ilegales denunciados por los menores durante su estadía en la Comisaría 11º.
Por su parte los concejales Carlos Comi (ARI) y Juan Rivero (Frente Progresista Cívico y Social) se reunieron ayer por la mañana con los padres y los chicos denunciantes. Los ediles expresaron su apoyo a los jóvenes e informaron que durante la sesión de hoy, el Concejo expresará su repudio a la actitud de los uniformados.
En relación al fallo del juez Sergio Scavone que ordenó al gobierno provincial poner más efectivos en las calles de Rosario, Perazzo aseguró que antes de fin de año, habrá mil nuevos uniformados patrullando la ciudad. "Hemos logrado ya 820 efectivos y estoy en condiciones de presentar una propuesta de 80 hombres más y 40 mujeres que completarían un cupo de mil y que son realmente necesarios", aseveró.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.