Diez personas murieron ayer entre ellas una niña de cuatro años, y otras 41 resultaron heridas, en un múltiple choque ocurrido en la ruta nacional 11, en el norte provincial protagonizado por tres ómnibus, una traffic y un camión. En dos de los colectivos viajaban peregrinos que regresaban del Santuario de la Virgen de Itatí, en Corrientes, donde el domingo se festejaron 106 años de su coronación pontificia. Ninguna de estas dos unidades habían partido de la terminal local donde se controlan las los coches a través de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT): el dato disparó la polémica sobre los controles del propio Estado. Pero como la niebla -sumada a una arriesgada maniobra del chofer adelántandose al otro micro- fue la causante de la tragedia desde la Subsecretaria de Transporte se lanzó una controvertida propuesta: impedir el tránsito cuando haya niebla.

El accidente ocurrió a las 3.30 en la ruta nacional 11, a la altura del kilómetro 825, cerca de la localidad de Las Garzas, y 270 kilómetros al norte de la ciudad de Santa Fe, cuando la visibilidad era casi nula a causa de la niebla. El choque se produjo entre un micro de la empresa El Pulqui que había salido de Buenos Aires y se dirigía a la ciudad de Corrientes, y otros dos contratados por los peregrinos con destino Rosario y San Lorenzo. Además, un camión y una Traffic que iban en dirección norte-sur y no lograron frenar a tiempo embistieron a los colectivos, informó la policía.

El subjefe de la Unidad Regional IX, comisario Sergio Sueldo, indicó que las causas del accidente están en investigación y afirmó que cuando se produjo el choque había en la zona "una densa niebla, lloviznaba y el pavimento estaba muy resbaladizo". Sueldo recordó que testigos dijeron que "uno de los micros que provenían de Itatí intentó al parecer sobrepasar a otro", encontrándose de frente con el de la empresa El Pulqui.

Por su parte el Subsecretario de Transporte de la provincia, Miguel Latorre dijo estar "muy afligido y consternado por este accidente" al momento que explicó que "hay dos problemas relacionados entre sí en ésta temática: el problema de la correcta circulación en momentos donde hay una altísima densidad de neblina, y el transporte público de personas, que no son los que deciden si circular o no".

En ese sentido, el funcionario agregó que hasta el momento se está instruyendo a los que transitan por las rutas cómo se debe circular cuando hay mucha neblina, "pero yo estoy insistiendo con mis funcionarios con la idea de que no sé si deberíamos permitir que se circule cuando hay neblina, creo que no se puede circular más así".

Además, Latorre ejemplificó su idea con lo que sucede habitualmente en los aeropuertos, en donde los días de intensa neblina, no ingresan ni egresan vuelos y aseguró que "el debate se tiene que dar".

Por otro lado y en cuanto a los controles que se realizan, el Subsecretario de Transporte de la provincia dijo que "si bien son servicios interprovinciales, y los controles que debería hacerlos la Nación, las cosas se dan en nuestro territorio por lo que hay que buscar soluciones ya, para que esto no ocurra más".

Por su parte el presidente comunal de Las Garzas, Fabián Copetti, confirmó que "prácticamente la visibilidad era nula y la carpeta asfáltica aún está muy mojada y resbaladiza". "Nos pusimos en contacto con la subcomisaría y nos presentamos en el lugar de la tragedia, pero era casi imposible hacer algo. No se veía nada, era un caos, hasta que comenzó a llegar ayuda desde las localidades vecinas, porque la situación nos superó", según reconoció Copetti. De igual manera el funcionario comunal aclaró que "en el lugar no hay repitencia de accidentes, sí hay una curva pronunciada pero la misma está perfectamente señalizada, pero la visibilidad era nula".

En tanto los heridos fueron trasladados al hospital de Reconquista y a los sanatorios Avellaneda y Norte, de la ciudad de Avellaneda: ocho de las diez víctimas mortales eran oriundas de Rosario y viajaban en el ómnibus identificado con el nombre de la empresa Almirante Brown, cuyo costado derecho fue arrancado por el otro colectivo que iba detrás, que lucía el nombre la firma Santa Lucía, que en igual forma que el anterior negó su titularidad. "Lo vendí hace un tiempo a una a persona de Capitán Bermúdez" insistió ayer José Damico el titular de la empresa de transporte de pasajeros. Ambas unidades impactaron luego con el vehículo de El Pulqui que transitaba en dirección opuesta, donde viajaban las otras dos víctimas mortales, que se dirigían hacia la ciudad de Corrientes, procedente de Buenos Aires. El coche que perteneció a Almirante Brown lleva por dominio ULF 553, interno 445 y el ex de Santa Lucía, RMU 336, especial 02.

Uno de los pasajeros de El Pulqui aseguró que uno de los micros habría intentado un sobrepaso. "Tengo entendido que venían dos coches de norte a sur y uno en sentido contrario, de esos dos coches, uno trata de pasar al otro, y se topa con el colectivo que venía sur a norte, y ahí se da el tremendo choque", precisó.