Desde Santa Fe

El jefe de gabinete Jorge Capitanich repudió anoche el fotomontaje de una prisionera de rodillas con el rostro de Cristina Fernández de Kirchner a punto de ser decapitada, que esta semana subió a su perfil de Facebook una Agrupación Renovación Universitaria de Rosario, alineada con Sergio Massa, aunque después borró la imagen. "Es un hecho absolutamente repudiable" y "execrable" que agravia "la investidura presidencial", dijo Capitanich y lo consideró parte de "una campaña insidiosa y sistemática" contra CFK que "merece el repudio de todo el sistema político argentino porque eso es atentar contra la democracia". A la mañana, la presidenta ya se había referido al "fotomontaje yihadista, que causaría gracia si lo que está pasando en medio﷓oriente no fuera una verdadera tragedia", escribió la Presidenta en su cuenta de Twitter.

Capitanich se reunió ayer en la Casa Gris con el gobernador Antonio Bonfatti para repasar proyectos institucionales con la provincia y después habló en la sede del Partido Justicialista sobre las "políticas públicas" del gobierno nacional. Antes del acto, en una rueda de prensa, Rosario/12 le preguntó sobre el "fotomontaje yihadista" -como lo llamó la presidenta- que la Juventud Massista Universitaria rosarina había subido a su página de Facebook, según una captura de pantalla que publicó "Cuna de Noticias". El portal le atribuyó la imagen a la agrupación Renovación Universitaria de Rosario, enrolada con Massa, informó que se había publicado el lunes 15, pero se multiplicó anteanoche después de un informe en el canal C5N, en el programa del periodista Gustavo Sylvestre. Es una prisionera de rodillas con el rostro de CFK "a punto de ser decapitada por un mercenario perteneciente al grupo terrorista Isis".

"Es un hecho absolutamente repudiable; primero, porque es una falta de respeto a la investidura presidencial y segundo, porque es una acción deliberada y execrable por parte de un grupo político", dijo Capitanich. Y lo vinculó con otros ataques a la presidenta. "No me cabe la menor duda que hay una campaña insidiosa, sistemática, con el objetivo de provocar este tipo de efectos y que merece el repudio de todo el sistema político argentino porque eso es atentar contra la democracia".

-Pero hasta ahora, ningún dirigente político ha dicho nada -se le recordó.

-Lo digo yo -contestó.

En ese sentido, Capitanich recordó el plan de cinco puntos de los fondos buitres. "Lo ha dicho la Presidenta, el ministro (de Economía, Axel) Kicillof y lo he dicho yo. Acá hay un plan siniestro promovido por los fondos buitres que lo llevan adelante con la siniestra intención de esmerilar la imagen de la Presidenta, impedir el financiamiento de capitales en la Argentina y tratar de generar acuerdos con futuros presidenciables para pactar condiciones absolutamente adversas para el país", afirmó el jefe de gabinete.

Los cinco puntos que mencionó Kicillof son: "1. Un ataque a la moneda para forzar una devaluación; 2. El ataque personal contra la Presidenta; 3. Impedir el pago local de los próximos vencimientos de la deuda en dólares; 4. Bloquear el financiamiento de la Argentina en cualquier otro mercado; 5. Y esperar a 2016 para arreglar el tema de la sentencia del juez Griesa con el próximo gobierno".

El jefe de gabinete interpretó su paso por el PJ como un aporte a la movilización partidaria y "la necesidad de trabajar en el fortalecimiento institucional de nuestro partido", dijo. "El objetivo es trabajar por la unidad, la participación y el consenso a los efectos de ser una fuerza arrolladora en las elecciones de 2015, pero sobre todo debatir. Me parece que es importante exponer sobre la realidad argentina e internacional, pero también conocer la posición de las compañeras y compañeros sobre distintos temas. Porque el debate enriquece siempre". "Vemos que es indispensable ratificar el liderazgo que se ha construido a partir de Néstor y Cristina Kirchner para darle continuidad al proyecto nacional", explicó.