"Antes de ver sufrir a mi familia prefiero pedir licencia. Me voy dolido", aseguró ayer el comisario Juan Pablo Garro que había sido nombrado como jefe de la Unidad Regional I de Policía cuando se recordó que había sido investigado en 2006 por tener símbolos nazis en su despacho. En realidad, el ministro de Gobierno Rubén Galassi, ya lo había echado por los medios cuando declaró que "se irá del cargo y volverá el comisario Vergara", que había sido separado porque está investigado en la causa que analiza el traslado de un camión con mil quinientos kilos de marihuana, hallado cerca de Arroyo Leyes.

La designación de Garro motivó denuncias de la comunidad judía de Santa Fe, del Inadi y de HIJOS entre otras entidades. La salida de Garro también debilitó al secretario de Seguridad Gerardo Chaumont que lo había ratificado dos veces en la jefatura.

"Yo no tengo ideología nazi", aseguró el jefe policial en declaraciones a la FM Aire de Santa Fe. Lo hizo sobre el filo del mediodía, enterado del escándalo que se había generado al difundirse imágenes de un operativo que encabezó en la comisaría 7ª, de la capital provincial, a pesar de que ayer el ministro de Gobierno provincial, Rubén Galassi, había adelantado que Garro iba a ser separado de su cargo.