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La propuesta que el diputado radical Mario Barletta deslizó para que el Frente Progresista Cívico y Social se sume al espacio conformado por el PRO y la UCR a nivel nacional mereció el rechazo desde el Partido Socialista. Miguel Lifschitz, que además de gobernador electo es el secretario general del partido a nivel provincial, descartó tal posibilidad, subrayó la independencia del Partido Socialista tanto del PRO como del peronismo, y en el mismo sentido se pronunció el ministro de Gobierno en funciones, Rubén Galassi.

"Nosotros tenemos un proyecto progresista en Santa Fe, claramente tiene que ver con la historia política de una coalición de muchos años. En eso no va a haber ningún cambio porque aspiramos a seguir representando una espacio que se diferencia de la actual estructura de Cambiemos o el peronismo, más allá de que tengamos consensos en temas puntuales", apuntó Lifschitz sobre la independencia que su partido mantendrá respecto de la alianza que gobernará el país desde el 10 de diciembre.

Galassi, a su turno, planteó: "No me veo discutiendo con Reutemann y Del Sel en una misma mesa; pensamos distinto". Evaluó que la coalición que gobierna Santa Fe "es una construcción política que lleva más de 20 años y hay que ser respetuosos de esa realidad. Esperamos con expectativa que haya medidas y acciones del nuevo gobierno nacional que beneficien a la gran mayoría de los argentinos. Pero de ahí a estar planteando reencaminar el proceso del Frente Progresista, creo que es apresurado e inconveniente", sostuvo el ministro.

Galassi lo dijo a nivel institucional de su espacio político, y también en lo personal. "Hoy no me imagino discutiendo en una misma mesa con Carlos Reutemann y Miguel Del Sel. No se trata de descalificarlos, sino de que pensamos distinto y, en el caso concreto de Reutemann, obramos de manera diferente cuando accedimos al gobierno de la provincia", afirmó el ministro de Gobierno de Bonfatti, que también formó parte del equipo de gobierno del primer mandatario socialista, Hermes Binner.