1 Olimpo: Cauteruchi; Iturralde, Páez, Mancinelli, Araujo, Tavio; Barrado, Pinto, Morales; Ulloa, Olivi. DT: Roberto Saporiti.

3 Central: Alvarez; Espinoza, Ribonetto, Fassi, Imperiale; Méndez, Costa, Borzani, Cristian González; Zelaya, Arzuaga. DT: Leonardo Madelón

Goles: PT: 35m Zelaya (C). ST: 18m Zelaya (C). 26m Lujambio (O) y 41m Cristian González (C) de penal.

Cambios: ST: Desde el inicio Robles por Barrado y Mancinelli por Lujambio (O), 19m Caraglio por Zelaya (C), 30m Moya por Costa (C), 34m Calgaro por Arzuaga (C) y Leandro Fernández por Olivi (O).

Arbitro: Néstor Pittana

Cancha: Olimpo de Bahía Blanca

Expulsado: ST: 26m Lujambio (O).

Supo ser superior al rival, por momentos pareció tener el encuentro dominado y gozó de un Zelaya tan lúcido como desconocido en la definición. Pero además de todo ello, ayer Central disfrutó de una necesaria dosis de fortuna, producto esto de un gol mal anulado al rival, algunas acciones insólitas en el área de Alvarez y un dudoso penal a su favor. Fue así como el canaya se trajo la primera victoria en condición de visitante de la era Madelón, y justo ante un rival directo en la lucha por el descenso. Con estos tres puntos los de Arroyito alcanzaron en el promedio a Ñuls y Racing.

Las conjeturas sobre lo que podía suceder en el juego de ayer se vieron reflejadas en el primer tiempo, donde los dos equipos evidenciaron sus debilidades deportivas. La reducidas dimensiones del campo de juego y las características de los 22 jugadores en cancha llevaron a que el partido se desarrolle con la pelota estando más tiempo en el aire que sobre el césped.

Olimpo intentó acorralar a Central invadiendo de volantes el mediocampo y desbordando a los marcadores laterales del fondo canaya, principalmente por el lateral donde se movía Imperiale. Es así como Araujo se transformó, por proyecciones, en el jugador más incisivo de los aurinegros. Mientras que Central intentó, aunque con escasos aciertos, abastecer a sus delanteros con la pelota al piso.

Fueron muchos los pelotazos al área y pocas las situaciones de gol. La más inquietante fue del local, que por medio de un centro dejó a Ulloa frente a la línea de gol, pero antes de que aparezca el cabezazo del delantero surgió el de Espinoza para desviar el corner. Central no urdía tres pases seguidos y eso mantuvo a los puntas lejos de alguna ocasión de gol. Como la pelota no llegaba, Zelaya optó por tirarse más atrás, y en la primera que tomó en el mediocampo corrió de frente al arco y al llegar al área sacó un zurdazo por arriba del arquero que puso sorpresivamente al auriazul en ventaja.

La respuesta de Olimpo llegó recién en el segundo tiempo, y en el marco de una jugada polémica y decisiva para el desenlace del partido. Lujambio ganó en el área un centro frontal de Morales y superó a Alvarez con cabezazo cruzado. Pero el árbitro, a instancias del línea, anuló la conquista por un inexistente fuera del juego. Y acto seguido Central amplió las diferencias: contra de Arzuaga, quien tocó para atrás para dejar a Zelaya presto a la definición en plena carrera, y el punta resolvió con toque preciso al segundo palo.

Algunos minutos más tarde las emociones retornaron. Ocurrió cuando Fassi dejó corto un rechazó de cabeza y apareció Lujambio para definir con otro cabezazo cruzado desde el punto del penal para superar a Alvarez. Pero en carrera de festejo el ex Ñuls le dedicó el tanto al línea que venía de anularle una conquista, y por exceso verbal debió dejar la cancha por expulsión.

Olimpo se volcó decididamente el campo rival y a centímetros estuvo del empate. Es que Robles estrelló un tiro en el travesaño y al capturar el rebote Ulloa tuvo el gol a disposición con un derechazo, pero Alvarez llegó a tocar la pelota mientras se caía y otra vez el palo lo salvó.

Se esperaba un final dramático para los canayas, cuando el árbitro cobró penal de Iturralde a Moya, a quien le pegó un puntazo en el pecho tras un mal cálculo a la pelota. Y el Kily González, con ejecución al medio, aseguró los vitales tres puntos para Central.