La destitución de Ricardo Caruso Lombardi como entrenador de Ñuls se puso en marcha la noche previa al partido que la selección Argentina de Showbol disputó ante Paraguay en el estadio cubierto. La salida del ahora ex técnico rojinegro no se debió a un ataque de ira por la posible partida de Hernán Bernardello, sino que la aparición Fernando Hidalgo ﷓negocia la compra de un porcentaje de Salcedo y el pase del volante central﷓ en escena habría acelerado los tiempos para que Ñuls se quedará, por segunda vez, sin técnico a una semana del inicio de un certamen. El foco más fuerte se había encendido en el instante posterior a la determinación de mandar a entrenar con la reserva a Claudio Husaín. El Turco habría visitado a Fernando Gamboa en el Hotel Ross Tower para darle el apoyo de los referentes del plantel ante la oferta inminente que llegaría desde la dirigencia de Ñuls.

La historia oficial narra que Caruso Lombardi salió disparado hacia las oficinas de Eduardo López tras la práctica matutina del pasado viernes tras enterarse que no iba a contar con Bernardello y que tras una nueva discusión, el presidente le pidió un paso al costado. De acuerdo a la información recogida por Rosario/12, el técnico había sido citado por el titular rojinegro para comunicarle que ya no iba a dirigir al primer equipo.

La decisión se había tomado algunas horas atrás cuando Fernando Hidalgo, cabeza visible del grupo inversor que pretende adquirir el 50 por ciento del pase de Santiago Salcedo y la totalidad de los derechos económicos del mediocampista, pidió como condición sine qua non un inmediato cambio de entrenador para que la millonaria operación pudiera seguir adelante.

El apremiante momento económico por el que atraviesa Ñuls habría sido determinante para que López, quien siempre tuvo dudas sobre darle continuidad al creador de uno de los ciclos más prósperos de su mandato, estableciera el fin de los días de Caruso Lombardi en el Parque.

El punto que motivó tal solicitud tendría relación directa con la salida de Claudio Husaín del plantel profesional y el enclaustramiento que el Turco sufrió al tener que entrenarse con los jugadores de la reserva. La medida, que nunca fue aceptada por los líderes del plantel, encontraría en el representante del futbolista al encargado de darle a Caruso el toque de gracia.

La celeridad con que se instaló el nombre de Fernando Gamboa como sucesor es un ingrediente que sirve para clarificar la real intención de Diego Maradona cuando en la conferencia de prensa que brindó en el estadio cubierto el día antes del juego ante los paraguayos apoyó a su compañero de equipo.

"Gamboa va a dirigir Ñuls en algún momento, ya le voy avisando a López que Fernando tiene que ser técnico de este club en el futuro". Un par de horas después se habría producido el encuentro entre el ex defensor del club y el actual volante rojinegro. Un empleado del hotel, que pidió reservas, asegura haber visto a Husaín en el Hotel de calle Santa Fe.

Caruso Lombardi tuvo una estadía en Rosario que se extendió durante 311 días y en ese lapso se encargó de darle identidad a un equipo que tenía la obligación de zafar del descenso y la promoción. Recuperó la mística ganadora como local tras un debut que mostró como Boca e Independiente se marchaban cabizbajos y con las manos vacías.

En medio de la ruta de escape a los últimos tramos de la tabla de promedios se dio el gran gusto de ganar el clásico en cancha de Central. "Es uno de los grandes momentos que me llevo de mi paso por Ñuls", dijo minutos después de la crisis de llanto que sufrió mientras se despedía de la prensa.

En el debe quedó el mejor manejo del grupo, como también apuntó Maradona aquella noche de julio. Las diferencias con Schiavi, su brutal exposición en los medios, las chances recortadas para algunos históricos, el pase a cuarteles de invierno para Husaín, fueron más fuertes que su intento por tapar conflictos con "los pibes me respaldan porque saben que no mentímos".

Pasó la era Caruso y ahora es tiempo de ver en acción al nuevo técnico. Que no sería otro que Fernando Andrés Gamboa, el hombre que brillara en el fondo los equipos de Marcelo Bielsa a comienzos de los 90. El Negro sería el conductor del nuevo ciclo que, según allegados a Eduardo López, sería puesto en marcha a partir del primer lunes de agosto.