Tenía el nombre menos conocido de la lista presentada para jugar el torneo. Fue incluido para prevenir una de esas casualidades pocos frecuentes: que se lesionen dos arqueros. No fue eso lo que sucedió en Central. Los canallas recurrieron a Cristian Alvarez, su tercer arquero, porque uno está lesionado (Juan Ojeda) y el otro, curiosamente el suplente, se hizo expulsar (Hernán Castellano ante Atlético Nacional). "Cuando el domingo lo vi salir lesionado a Juan (Ojeda) me di cuenta que iba atajar el jueves", reconoce Alvarez, el arquero que esta noche debutará en Central.

"Tras el partido con Instituto me fui rápido de la cancha porque tenía un compromiso familiar. No pude pasar por el vestuario. Pero después me llamó el entrenador de arqueros (Gustavo Flores) para hablarme un poco", asume Alvarez, quien en el 2004 fue comprado a Tiro Federal por el valor de 135.992 litros de nafta súper, de acuerdo el contrato subscripto entre las entidades en el 2002.

--¿Te llamó para tranquilizarte?

--No, para bromearme. Pero también me dijo que me quede tranquilo porque venía trabajando muy bien.

--Es que no debe ser casual tu inclusión en la lista de la Libertadores.

--Sí, eso marca que me tienen confianza. Ser el tercer arquero a tan corta edad (20 años) significa que puedo aportar algo. Yo estoy tranquilo. La verdad que trato de no pensar mucho, pero es difícil. Por ahí me llaman de una radio, un diario y todo se hace más difícil. Traté de no pensar mucho, pero hago zapping en la tele y escucho lo que se dice.

--¿Son lo medios de comunicación los que cargan de presión al jugador?

--Pero es normal, es el trabajo de los periodistas. Yo no escucho lo que se dice para no volverme loco. En Central la presión se siente siempre porque somos todos chicos jóvenes y la gente es muy impaciente. Debemos ser profesionales para hacer las cosas lo mejor posible.

--Tu debut será en un torneo internacional. ¿Eso estimula o genera más responsabilidad?

--Motiva, obviamente. Debutar en Copa Libertadores, en un partido tan importante y a cancha llena no es para cualquier jugador.

--¿Imaginás como va a estar el Gigante?

--Va a estar llena, ¿no?

--¿Al ser un plantel joven es más difícil jugar a estadio colmado?

--No, no creo. Yo creo que al principio me va a generar un poco de presión, pero a medida que se vaya dando el partido todo eso se vuelve a favor. No creo que tenga mucha historia para jugar.

--Vas a ser el centro de atención de los hinchas.

--Sí, ya lo viví en estos días de entrenamiento.

--Al fin y al cabo es el momento más deseado de tu carrera.

--Seguro, y por el cual estuve entrenando durante tantos años. Todo llega y este es el momento más esperado para un jugador de fútbol. Pero lo bueno es que estoy tranquilo.

--¿Y la familia cómo lo vive?

--No, están locos, enloquecidos. Yo tengo que tranquilizar a ellos. Mi mamá camina de un lado para otro, está terrible, muy movediza.

--¿Cuán importante es la palabra de Angel Zof?

--Muy importante por todos los años que tiene en el fútbol. Sabe mucho y obviamente escuché sus consejos.

--¿Calma algo el hecho que el equipo venga de un triunfo que sirvió para dejar atrás una racha de cuatro derrotas?

--Seguro, porque eso nos dio mucho aire para afrontar un partido como éste. Cuando uno se ve algo más arriba en la tabla las cosas empiezan a cambiar, se habla de otra manera y eso tranquiliza un poco.

--¿Comenzaste a jugar en Tiro Federal?

--Sí, con edad de décima división. Y después pasé a Central.

--¿Sabías que tu pase fue tasado en litros de nafta?

--Sí, sí, lo sabía, pero no me interesé mucho del tema porque eran cosas de los dirigentes. Me habían dicho que estaba cotizado en litros de nafta. Aunque el pase a Central lo viví muy tranquilo. Y ahora vivo igual este momento.

--Por último, ¿por qué repetir que estás tan sereno a horas de tu debut?

--Porque la pelota es la misma con la que estoy entrenando desde que empecé a jugar en Tiro.