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Jueves, 11 de noviembre de 2010

DEPORTES › SOBRE LA HORA, EL PALO LE NEGó A ÑULS LA CLASIFICACIóN EN QUITO

Sólo falló en el tiro del final

Al equipo de Sensini no le pesó jugar en la altura ni frente a uno de los mejores del continente. Disputó cada pelota, se defendió correctamente y tuvo sus chaces. Estuvo cerca de la hazaña, pero el poste impidió el empate.

1 Liga de Quito: Cevallos; Guagua, N. Araujo, Calderón; Reasco, Ulises De la Cruz, W. Araujo, Salgueiro, Chila; Luna, Barcos. DT: Edgardo Bauza

0 Ñuls: Peratta; Alayes, Schiavi, Cichero; Vella, Bernardi, Mateo, Estigarribia; Formica; Sperdutti, Borghello. DT: Roberto Sensini.

Gol: ST: 34m Calderón (L),

Cambios: ST: 16m Bolaños por Ulises De la Cruz (L), 33m Calderón por Barcos (L), 37m Salvatierra por Vella (Ñ), 41m Taborda por Bernardi (Ñ), 43m Espínola por Salgueiro (L) y 44m Luis Rodríguez por Borghello (Ñ),

Arbitro: Oscar Ruiz (Colombia)

Cancha: Liga de Quito


La paridad entre los equipos llevó a que la serie se resuelva con final emotivo e incierto. Porque Ñuls quedó a un gol de la clasificación, en un partido donde tuvo a Sebastián Peratta de figura y logró disimular los efectos que produce al físico correr a casi tres mil metros de altura. Los leprosos tuvieron sus oportunidades, comprometieron a los ecuatorianos en tramos del partido, pero, como en el partido de ida en el Coloso, careció de definición. Y Liga encontró el tanto de la clasificación a diez del final, con una sorpresiva mediavuelta de Calderón.

Liga no salió a jugar con la prepotencia ofensiva que se presumía por sus antecedentes en partidos internacionales en su estadio. Los ecuatorianos comenzaron con dudas el encuentro y hasta tomando recaudos defensivos. Pero los jugadores de Ñuls tuvieron temor de asfixiarse en las primeras corridas y jugaron el primer cuarto de hora asumiendo precauciones en el despliegue. El único que se esforzó a fondo fue Peratta, y por sus atajadas los leprosos sostuvieron la paridad.

Ñuls comenzó a verse desbordado una vez que Liga advirtió la cautela de los rojinegros al momento de correr. Salgueiro fue el jugador ecuatoriano que más problemas le trajo al fondo leproso. El ex Estudiantes aparecía por derecha y sorprendía por izquierda. Del lado de Cichero nacieron sus desbordes más profundos. En el primer desborde el centro rebotó en el travesaño, en el segundo cabeceó afuera Barcos.

La pelota no llegaba a los volantes y así a la lepra se le hacía imposible salir del encierro. Barcos desafió a Peratta con remate largo y otra vez la pelota se estrelló en el travesaño. El uno de Ñuls se quedó con un centro bajo de Luna que había superado a toda la defensa y luego Salgueiro intentó sorprenderlo, sin suerte, con tiro libre.

Pasada media hora de juego Liga mermó su intensidad y Ñuls recogió protagonismo ofensivo. Sperdutti fue quien se hizo cargo de todas las pelotas de ataque, aunque en ninguno de los desbordes logró que Borghello o Formica conecten sus centros. Por eso la más clara apareció en jugada a dos toques: Formica cedió a Borghello y el delantero remató al cuerpo de Cevallos. Luego Alayes intentó desde afuera del área con disparo bajo que encontró atento al arquero de Liga. Se fueron los primeros 45 minutos y Ñuls logró superar las adversidades que imponían los 2800 metros de altura de Quito.

Más decisión mostró Ñuls en el segundo tiempo. El equipo de Sensini logró tener la pelota y cuando se animó ir al arco rival logró jugadas claras, como la que tuvo Borghello al pisar el área, la cual resolvió otra vez con disparo al cuerpo de Cevallos.

Liga no sabía como superar los esfuerzos físicos del rojinegro por cerrar espacios. Ante el desconcierto los locales se decidieron por probar con remates de larga distancia, pero en todos los casos Peratta se quedó con la pelota sin dar rebotes. La lepra fue agotando sus energías y aunque Liga no lo desbordaba, una mediavuelta de Calderón marcó el gol de la diferencia con tiro cruzado y bajo, lejos de las manos de Peratta.

Ñuls tuvo la clasificación sobre el final, pero el tiro de Salvatierra pegó en el palo. Liga aguantó la diferencia y eliminó a la lepra de la Sudamericana, aunque para ello sufrió hasta el pitazo final.

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Peratta fue la gran figura leprosa. Logró disimular los efectos que produce jugar a 3000 metros de altura.
 
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