Habrá que decidir entre comer temprano e ir para la cancha, o bien dejar de lado la familia y salir corriendo para Génova y Cordiviola. Es que el inusual horario de las 14, impuesto por la AFA, para que se juegue el clásico número 151 entre Central y Ñuls, pone en duda la ingesta dominguera porque, ya se sabe, un resultado indeseado puede caer mal con el estómago lleno. Esta tarde Rosario volverá a dividirse en dos con la disputa del clásico, entre un canalla de pobre campaña y la lepra escolta de River a un solo punto de distancia. El duelo, uno de los más calientes y disputados del fútbol argentino, se disputará en un repleto Gigante de Arroyito, que contará con un operativo de seguridad con la participación de 1100 policías. El árbitro será el internacional Horacio Elizondo y el encuentro podrá verse en directo en la ciudad a través de la señal codificada TyC Max.

No importa demasiado cómo vienen. Aunque es oportuno recordarlo, más allá que los pergaminos anteriores no cuentan en un clásico. A simple vista, ojeando la tabla de posiciones, los rojinegros saldrán a la cancha con el traje de favoritos. Coqueteando con la punta en dos oportunidades, el equipo de Nery Pumpido no paró de sumar elogios de propios y extraños en su firme paso por el Torneo Clausura.

Por el lado de Central, la floja campaña en el comienzo del campeonato, que obligó a los dirigentes a buscar a Leonardo Astrada tras el paso al costado de Angel Zof, lo encuentra al equipo deambulando por el fondo de la tabla. Pero más allá del traspié ante los millonarios, el equipo había mostrado otra faceta, dejando atrás el mal momento que estaban atravesando, y mirando el futuro con otra expectativa.

No es menos importante que ambos conjuntos están peleando por pasar de fase en la Copa Libertadores. Difícil es el panorama para Central, que depende de varios resultados para poder sortear la primera ronda, y complicada la suerte de Ñuls, que deberá vencer sí o sí en los dos partidos que le restan para seguir en carrera en el torneo internacional.

Por todos estos motivos, el partido de esta tarde es de vital importancia para encarar lo que queda. El ganador tendrá a su favor un plus extra en la parte anímica, y será trabajo de los entrenadores hacer hincapié en estas cuestiones.

En su partido más importante desde que llegó a Central, Leonardo Astrada introducirá cinco variantes con respecto al equipo que perdió en el Monumental ante River por 2 a 0: Cristian Alvarez, Germán Rivarola, Eduardo Coudet, Leonardo Borzani y Pablo Vitti ingresarán por Hernán Castellano (desgarro en la cara posterior del muslo derecho), Ricardo Moreira, Hernán Encina, Damián Ledesma y Emilio Zelaya. Para el banco de suplentes, el Jefe contará con Jorge Broun, Gabriel Loeschbor, Ricardo Moreira, Damián Ledesma, Hernán Encina, Emiliano Papa -que regresa al primer equipo después de su grave lesión en el torneo pasado- y Emilio Zelaya.

En tanto, Ñuls saldrá con los mismos once que el miércoles resignaron el liderazgo tras empatar 1-1 con Boca en el Coloso del Parque. Nery Pumpido tendrá en el banco de relevos a Marcos Gutiérrez, Hugo Colace, Adrián Lucero, Gustavo Rodas, Adrián Peralta, Damián Steinert e Iván Borghello.

Formaciones

Central: Alvarez; Villagra, Raldes, Fassi, Rivarola; Coudet, Borzani, Díaz, Eluchans; Vitti, Ruben. DT: Leonardo Astrada

Ñuls: Villar; Gavilán, Aguirre, Spolli, Ré; Cejas, Husain, Zapata, Belluschi; Ortega, Scocco. DT: Nery Pumpido

Arbitro: Horacio Elizondo

Cancha: Central

Hora: 14

TV: TyC Max codificado.