3 Ñuls: Guzmán (6); Cáceres (6), Vergini (6), López (6), Vangioni (6); Orzán (5), Villalba (6), Bernardi (6); Muñoz (7), Scocco (8), Tonso (5). DT: Gerardo Martino.

0 Atlético Rafaela: Sara (5); Sacks (4), Fontanini (4), Bovaglio (4), Eluchans (4); Gaitán (4), Fissore (4), Ferro (3), Rojas (5); Grazzini (5), Federico González (5). DT: Víctor Bottaniz.

Goles: PT: 1m Muñoz (Ñ). ST: 1m Muñoz (Ñ) y 38m Scocco (Ñ).

Cambios: PT: 39m Mateo (6) por Villalba (Ñ). ST: 17m Carignano por Sacks (AR), 26m Depetris por Grazzini (AR), 28m Díaz por Orzán (Ñ), 36m Figueroa por Tonso (Ñ), 37m Capellino por Ferro (AR).

Arbitro: Luis Alvarez

Cancha: Coloso del Parque.

Así como el segundo tiempo ante Godoy Cruz puede explicar el bajón que alejó a Ñuls de la punta, o bien el triunfo ante Colón, por citar otro ejemplo, acercó razones para sostener a la lepra como gran candidato, el partido de ayer, ante Atlético Rafaela, representa la muestra más acabada de lo que fue el conjunto de Gerardo Martino a lo largo del año: un equipo básicamente ganador, con ratos de buen fútbol y superior a los rivales en muchos aspectos del juego. Por todo eso los rojinegros celebraron la vuelta del club a la Copa Libertadores, clasificación que se adjudicó tras golear con comodidad a los rafaelinos, pero como consecuencia de todo los puntos que cosechó la lepra en la temporada, solo superado por los campeones 2012: Arsenal y Vélez.

Los últimos cinco partidos sin victorias apartaron a Ñuls de la pelea por el título, floreciendo algunos grises en su fútbol que no se le conocían. Pero la ilusión trunca no le cambió el ánimo al hincha, ni las convicciones a Martino. La lepra jugó ayer con solvencia haciendo creer a los simpatizantes que al partido le sobraba el segundo tiempo.

Pero no por eso fue un encuentro para destacar de la lepra. Atlético Rafaela, que desde hoy será dirigido por Jorge Burruchaga, se propuso pelear el partido en el medio, con dos líneas de cuatro, un enganche (Grazzini) y un punta (González). Esa idea quedó obsoleta al minuto de juego, cuando Scocco dejó pasar un centro de Vangioni para que Muñoz se anticipe al defensor y defina de zurda al palo cruzado, marcando el primero antes que el arquero Sara se ajuste los guantes.

Con la comodidad de la ventaja en el marcador, Ñuls jugó distendido, llevando el partido a un lugar de intrascendencia: a la mitad de la cancha, donde los volantes batallaban y se quitaban la pelota una y otra vez, quedando Guzmán y Sara más lejos de la visión del balón que cualquier plateísta.

Con un Ñuls distraido en ataque, con Orzán y Tonso más imprecisos que el resto, Rafaela intentó quitarse algo de vergüenza con un remate largo de Rojas que pegó en el travesaño, y luego inquietó con un desborde de Federico González por la izquierda, con remate fuerte que Guzmán desvió con ambas manos.

Villalba dejó la cancha por lesión e ingresó Mateo, quien en el segundo tiempo le dio mejor orientación al juego en el medio, ayudado de un Bernardi más punzante en sus pases. Y otra vez al minuto de juego Muñoz anotó, en este caso con un cabezazo tras genial desborde y centro a la cabeza de Scocco.

El rojinegro dedicó tiempo para ser justo con Scocco, su máxima figura, y en la búsqueda del tercero llegó el grito del mejor jugador en cancha, con toque por sobre Sara, tanto que lo pone en lo más alto de la tabla de goleadores junto a Ferreyra (Vélez) con once conquistas. Por entonces el hincha saltaba bajo la lluvia y celebraba por el año de buen fútbol, por todos los puntos sumados (65), que dejaron atrás el pánico del descenso para abrir en su horizonte la ilusión de la Copa.