En un principio de acuerdo, fundado en la máxima de que "el club devolverá sólo la plata que le prestaron", abogados de Central y de inversores del club se comprometieron a descomprimir la agonizante coyuntura financiera de la entidad, instancia donde algunos alientan el principio de la rehabilitación institucional. Esta brisa de optimismo encuentra respaldo en la recuperación del pagaré del Real Madrid, que estuviera a disposición de los dirigentes suspendidos y hoy se encuentra nuevamente en poder de las autoridades de la entidad. Esto se debe a que el inversor que poseía el valor optó por devolverlo, para abrir así un ámbito de diálogo con la autoridades del club respecto a la plata que Central le adeuda.

Negociación I. "Desde hace años venimos poniendo plata en el club y todavía no nos devolvieron un sólo peso", le espetó uno los abogados del empresario de medios de comunicación devenido en inversor futbolístico. La respuesta fue lacerante: "Ustedes le piden al club la plata que nunca pusieron". De esta manera se inició la negociación con uno de los inversores de Central que vio peligrar su acreencia con la suspensión de 19 dirigentes.

Las dos partes tenían razón. La deuda, que fuera contraída por el propio Pablo Scarabino, ascendía a los 6 millones de dólares. Pero no toda estaba documentada. Entonces, bajo la intermediación de la jueza Liliana Giorgetti, las partes consensuaron que la entidad honre todo acreencia que tenga su verificación pertinente. El compromiso del club satisfizo al inversor, tal es así que puso a disposición del club los derechos federativos del jugador Angel Di María, que habría sido cedido por los dirigentes sancionados por la Justicia. "Si querían estaban en condiciones de llevar a Central al fideicomiso", admitió uno de los asesores letrados de Scarabino.

Como colofón de esta negociación, al abogado Gustavo Isaack, que es uno de los patrocinantes del inversor, recibió un atentado con bomba molotov en el frente de su domicilio.

Negociación II. El otro frente de conflicto descansaba en el "Acuerdo de cesión de créditos y deudas" firmado por los dirigentes suspendidos, que diera a conocer este diario el pasado lunes. En aquel contrato, donde Central identificaba una deuda para con Wilfredo Scarpello de 4.520.235 dólares, se dejó constancia de la cesión al inversor del pagaré del Real Madrid, además de derechos de telvisación, el 13 por ciento del pase d todo jugador profesional y la totalidad de los derechos económicos de Ronald Raldes.

Pero ante la posibilidad cierta de abrir una investigación penal sobre la administración del documento, los abogados auriazules lograron recuperar el pagaré, por un valor de 1.440.000 euros, arribando a un acuerdo con Scarpello que se trazó sobre bases similares al alcanzado con el otro inversor de peso. "Quedó anulado el acuerdo firmado por los dirigentes suspendidos", anunció uno de los abogados de Central. Así, a Scarpello se le reintegrará el dinero que oportunamente prestó, cifra que está lejos de llegar a los cuatro millones y medio de dólares reconocidos en el polémico "Acuerdo...", y con la restitución del buscado pagaré la semana próxima Central saldará deudas, incluidas los salarios de todos sus empleados.