Con la presencia en Ñuls de Diego Barreto, Pablo Aguilar, y quizá alguna sorpresa, y la de Juan Azconzábal en Central, los planteles superiores de los equipos de la ciudad volverán mañana por la mañana a los entrenamientos. Los rojinegros se reencontrarán en Bella Vista bajo el mando de Pablo Marini, al tiempo que los auriazules lo harán en Granadero Baigorria con la supervisión de Carlos Ischia.

Los leprosos esperan concretar la llegada de más refuerzos en las próximas horas, dado que los arribos del arquero Barreto y el defensor Aguilar no cubren las mayores expectativas del conductor rojinegro. Los jugadores del parque Independencia están citados para mañana a las 8 en el polideportivo de Bella Vista. Entrenarán toda la semana en horario matutino y el domingo los designados por Marini viajarán en micro a Miramar, lugar designado para concretar los trabajos más intensos de la pretemporada.

En Central, por el contrario, el equipo realizará toda su preparación en Granadero Baigorria. La única sorpresa en la vuelta al trabajo será la presencia de Azconzábal, quien está cerca de renovar contrato. El ex Banfield jugó a préstamo a cambio de 160 mil dólares anuales. Para seguir en Arroyito lo ofrecieron 90 mil dólares por 12 meses, pero acordaría en 120 mil, dado que para Ischia "es el jugador que va a manejar el vestuario", ante la partida de Cristian González.