El Centro de Expresiones Contemporáneas de Rosario parece haber encontrado por fin su cauce, después de que años atrás esperara por el arreglo de sus techos que tantos problemas acarreó a la programación anual. En estos dos últimos años las artes plásticas se han revalorizaron en el espacio, conjuntamente con todas las otras actividades que usualmente se realizan. El 19 de noviembre pasado se inauguraron diversas muestras que dan una clara idea de lo que el lugar propone dentro del rubro: diseño, fotografía (de rosarinos y franceses), el programa 0/25 y el Proyecto Nodos.

Hubo visitas de extranjeros para este final de festejos: Samuel Bollendorff dentro del ciclo Visa Pour L'Image auspiciado por la Embajada de Francia; Claudia Casarino de Paraguay curada por el actual Secretario de Cultura de ese país, Ticio Escobar y Nicolás Franco Guzmán de Chile curado por el famoso crítico Justo Pastor Mellado.

Además los rosarinos Fer Figueras y Gustavo Prado (ambos viviendo en el extranjero) en la parte de fotografía -curada por Andrea Ostera-, Esteban Paniagua y Ariel Chiesa en el área de diseño curada por Horacio Gorodischer, Ciro Bonomelli ﷓tan sólo de doce años﷓ en 0/25 curado por Lisandro Arévalo y Marcela Cattaneo (ex Rozarte) en el Proyecto Nodos.

El CEC fue concebido para el cruce, la experimentación y la superposición. Por más que esta vez el espacio fue demasiado "estirado" para que todas las muestras cupieran y convivieran (un gran esfuerzo de todo el equipo de montajistas, diseñadores del espacio y curadores), la resultante final muestra que las obras se sostienen por sí solas.

Sobre las visitas extranjeras, se puede decir que el francés Bollendorff presenta excelentes tomas de fotoperiodismo de diversas situaciones y países, la paraguaya Casarino una sutil instalación titulada Uniforme, con más de cincuenta prendas de tul negro en etérea conjunción, y el chileno Guzmán en Informe de campo, otra instalación con dos gigantes banderas con los colores de nuestros cuadros de fútbol local (Rosario Central y News Old Boys) con el sonido, en pequeños parlantes, de los insultos que las hinchadas suelen propinarse como complemento.

El CEC es un espacio que fue pensado para que todas las expresiones del arte interactúen contaminándose, es el único espacio que posee instalaciones idóneas para realizar montajes de gran calado, como demostraron las obras de las dos últimas semanas del arte de Rosario, que de no haber sido montadas allí no tendrían lugar dónde ser apreciadas.

La comunidad artística pide un esfuerzo más en su programación anual para que algún día sólo una o dos instalaciones de arte puedan verse en todas las naves del espacio; casi como un adelanto este año lo lograron Graciela Sacco y Norberto Puzzolo.