Domingo, 10 de septiembre de 2006 | Hoy
CULTURA / ESPECTáCULOS › SUDAMERICA DESDE DENTRO EN CURIOSAS FOTOGRAFIAS ESTENOPEICAS
Los artistas del colectivo Mate con Café recorrieron gran parte de América equipados con curiosos artefactos de fotografía.
Por Edgardo Pérez Castillo
Varios preceptos son los que confluyen en Sudamérica desde dentro, el proyecto artístico del colectivo Mate con Café que integran Marcela Isaza e Iván Crespi. Por un lado, el carácter social que le imprimieron la socióloga colombiana y el trabajador social nacido en Bernardo de Irigoyen, pueblo ubicado a cien kilómetros de Rosario. El otro, el de recuperación del sistema de fotografía estenopeica, mediante el cual proponen una democratización del arte y un desaceleramiento en tiempos de vorágine tecnológicas.
Porque la afición de Isaza y Crespi hacia la fotografía terminó complementándose con sus respectivas inclinaciones profesionales, y cuatro meses atrás comenzaron un periplo que, con rumbo norte--sur, les permitió recorrer Bogotá, Cali, Ecuador, Perú, Bolivia y buena parte del norte argentino. Equipados con unas 25 latas adaptadas al sistema de fotografía estenopeica (ver recuadro) y los químicos necesarios para el revelado, se lanzaron al camino con una convicción: la de aportar en la reconstrucción de los tejidos sociales.
Así lo distinguió Isaza a Rosario/12, al detallar los dos pilares sobre los que edificaron el proyecto: "Uno es poder transmitir la técnica de la fotografía estenopeica. Buscamos trabajar con comunidades urbanas y rurales, transmitir la experiencia y que estas personas queden completamente capacitadas para, a su vez, poder transmitir la experiencia en sus comunidades. Porque tiene una ventaja, que es sumamente económica. Esto nosotros lo hacemos a través de instituciones que respalden el trabajo, y para que la gente que participe no tenga que pagar un peso, porque el dinero no entra a mediar allí. La otra parte del proyecto es poder reproducir esta técnica y poder hablar desde el arte, desde nuestras propias realidades, conocer otras realidades que no se conocen, que es lo que queremos hacer con esta muestra, y reflexionar frente a qué es América Latina, qué es nuestro continente. Hay arte aquí, gente que quiere salir adelante, que quiere vivir".
En ese sentido, Crespi destacó que "hay lugares a donde nunca llegaría la fotografía de otra forma, por no tener acceso a la cámara", y remarcó: "Había días en que estábamos en alguna plaza de Latinoamérica con un trípode y una lata arriba, entonces se juntaban a lo mejor treinta personas a ver de qué se trataba. Surgía entonces mucho intercambio, había chicos que vendían globos y querían aprender para poder vender otra cosa que los dignifique más. Se va dando una cosa muy interesante".
Con la intención de comenzar a volcar en un libro los resultados obtenidos con las distintas latas a lo largo de su extenso viaje, en cada una de las localidades a las que arriban Isaza y Crespi buscan montar talleres que permitan la citada transmisión de conocimientos. En paralelo, la exposición de parte de su obra se convierte en una tentadora invitación para aprehender una técnica tan antigua como vanguardista, a partir de las infinitas posibilidades de experimentación implícitas en el sistema estenopeico.
Un sistema que, por otra parte, permite quebrar la vertiginosidad implícita en cada avance tecnológico, según distinguió la socióloga: "Hoy en día el mundo que vivimos es muy acelerado, donde la modernidad lanza cada día un objeto nuevo, con tecnología al cien por ciento, compras una cámara hoy y a los tres meses esa cámara es vieja. Además tienes que tener acceso a los costos para cualquier objeto, porque no solamente necesitas la cámara. Y por un lado se ha perdido un poco la parte artística de la fotografía, y se han abierto otros espacios artísticos, completamente válidos. Pero por otro lado es totalmente imposible acceder a eso para muchas personas, entonces la idea de esta técnica es, en pleno Siglo XXI, volver al principio de la fotografía, con lo más económico, con el principio básico. Jugar con la fotografía, porque nada en la fotografía es error, todo el error es algo válido para poder aprender. Entonces se trata, en pleno Siglo XXI, de poder hacer arte, de hacer fotografía de una manera muy económica al alcance de las manos del niño, del profesional, del obrero, de cualquier persona. Es a partir de la fotografía que queremos trabajar en sociedad".
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.