Aunque poco tiempo haya transcurrido desde aquella distinción, largo es el camino que separa al presente Franco Luciani de aquel que fuera galardonado con el premio Revelación en la edición 2002 del festival de Cosquín. Y es un arco que va más allá de lo temporal: en ese lapso, el músico logró establecerse como una de las nuevas figuras del folclore argentino. Pero lejos de navegar plácidamente sobre ese status, el armoniquista rosarino comenzó a visitar todo escenario al que fuera convocado en calidad de invitado, aportando con su versatilidad a todo género que así lo requiriese. Luis Salinas, Pedro Aznar, Raúl Barboza, Chango Farías Gómez, Liliana Herrero, Divididos, Lidia Borda, Raúl Carnota y Mercedes Sosa fueron algunos de los que le permitieron pasearse por un generoso abanico estilístico. Pero un día, Luciani decidió profundizar en un nuevo proyecto.

Para ello convocó al pianista Daniel Godfrid, dando vida al dúo que en diciembre de 2005 registró Armónica y tango, el disco que esta noche tendrá su presentación formal en la ciudad, con un concierto que se llevará a cabo desde las 21.30 en el Centro Cultural Parque de España. Y no es injustificada la demora en la presentación, generada como consecuencia de la gira que el pianista mantuvo con la Orquesta Escuela que tiene como voz central a Lidia Borda, lo que postergó la llegada del concierto a Rosario, a casi un mes del que brindaran, con destacada repercusión, en La Trastienda porteña.

La valoración que Luciani hace de su compañero de ruta justifica la demora: "Con Daniel comparto muchas cosas además de la música. Yo no lo conocía personalmente, pero me habían hablado de su trabajo, a él le habían comentado el mío entonces lo contacté y le comenté de qué se trataba esta propuesta. Y la verdad es que tenemos solamente algunos meses de diferencia, entonces compartimos muchos gustos musicales, y este proyecto no lo concibo separado de lo que hicimos con Daniel".

Reuniendo obras como Sur, Che bandoneón, Adiós Nonino, Los mareados o Niebla de Riachuelo, Armónica y tango incluye además a dos composiciones de neto corte folclórico, en una decisión lógica al analizar el recorrido artístico de Luciani, que apuntó: "Tiene que ver con marcar el rumbo de una carrera. Que no quiere decir que voy a dedicarme únicamente al tango, sino a la música argentina. De hecho desde hace tres años en el Atahualpa Yupanqui de Cosquín vengo incluyendo algún tango, y ahora en este disco queríamos darnos el gusto de grabar un bonus track como Pastor de nubes. Y también está Los ejes de mi carreta, que es un tema que han grabado varios artistas de tango".

Para un futuro cercano, Luciani planea volver a estudios para continuar profundizando con esta senda en la que el folclore y el tango se unifican a través de la versátil armónica del rosarino, ésa que ocupa con soltura los roles del bandoneón o nostálgicos fraseos melódicos. Sin embargo, aun no ha definido si ese trabajo se llevará a cabo bajo este formato de dúo o si lo encontrará una vez más al frente de un grupo. Por lo pronto, el concierto que esta noche brindará sobre el escenario de Sarmiento y el río girará en torno al dúo que conforma con Godfrid, incorporando además algunos artistas locales que aparecerán en escena a modo de sorpresa.