Este lunes el Conjunto Pro Música Antiqua de Rosario cumple 45 años. Y para festejar junto a los rosarinos, la agrupación ha organizado una velada de gala que tendrá lugar a las 21 en el Auditorio Fundación (Mitre 754). Con un suculento programa dedicado íntegramente a Johann Sebastian Bach y el acompañamiento de los solistas --vocales e instrumentales--, entre los que se detacan Analía Torregiani (soprano), Laura Leal (contralto), Mario Martínez (tenor), Adrián Katzaroff (bajo), Rodolfo Marchesini (violín), Susana Rinesi (flauta travesera), Luis Giavón (oboe), Susana Schlaen (fagot) y Manuel Marina (clave).

En programa figuran tres cantatas, de las cuales dos son religiosas (la "Fúnebre" BWV 150 y la "Nupcial" BWV 196) y una profana (la cantata "Nupcial", BWV 202). A su vez, se intercala entre ellas el "Concierto Brandenburgués" N° 5 (BWV 1050). Todo un homenaje a la obra del genio alemán.

"Es que Bach está ahí y no hay muchos que se ocupen de él", comienza diciendo el maestro Cristián Hernández Larguía (director general y fundador del Conjunto Pro Música Antiqua), en diálogo con Rosario/12.

"Lo cierto es que la monumental obra de este monumental compositor es prácticamente desconocida en nuestro medio", asegura Larguía. Y para confirmarlo aporta un dato estadístico: "De las casi 200 Cantatas compuestas por Bach, diría que solo unas 10 son conocidas en Rosario. Mejor, sólo unas 10 han sido ejecutadas alguna vez en Rosario. No estará de más recordar que Bach es el único compositor reconocido y admirado por todos los compositores que lo sucedieron. Por eso la elección. Pero además debo reconocer que es él mi compositor preferido. Me resulta difícil decir por qué pero mis primeros recuerdos, digamos alrededor de los 4 años, están ligados a su obra. Y es que por alguna razón desconocida poseo una marcada sensibilidad por la polifonía imitativa y por el contrapunto. Parezco ser algo así como un criollo con mentalidad franco-﷓flamenca", apunta el maestro.

En un país en donde los proyectos culturales tienen siempre un incierto futuro, resulta francamente notable que una empresa cultural pueda festejar 45 años de vida.

"Creo que algo fundamental para valorar la labor realizada por el Pro Musica en estos años, es que ha sido llevada a cabo en forma estrictamente vocacional. Las mayores dificultades fueron las de siempre: luchar contra la apatía del medio, que centra su interés en lo que viene de Buenos Aires o del extranjero. Nuestro reconocimiento --me duele aceptarlo--, parte de la Capital Federal. En lo personal, es curioso que fuera esa ciudad la que me concediera el pomposo título de "Gloria de la Cultura Nacional", muchos años antes que mi ciudad me concediera el de "Ciudadano Ilustre". Entre los aciertos quizá podamos mencionar el haber mantenido una línea y una coherencia invariable desde nuestra fundación allá por la década del 60. Esto último puede ser visto como una auténtica rareza en la era de los camaleones y del todo vale", reflexiona Hernández Larguía.

Si bien sus preferencias musicales pueden resumirse en "las épocas de la buena música, que se encuentra en todas las épocas", su pasión por la música antigua lo llevó a crear este organismo destinado a la difusión de este género, exclusivamente acotado a la interpretación de música occidental de la Edad Media, el Renacimiento y el Barroco.

"Se me ha hecho fama de ser una especie de ermitaño que vive en el pasado. Sin embargo, mi actividad musical, pública y notoria contradice tal catalogación", aclara enfáticamente a esta redacción. "De hecho la primera obra dodecafónica a cappella realizada en el país se llevó a cabo en Rosario, y la dirigó este servidor. Lo que ocurre es que el término 'antiguo' se presta a confusiones. A Bach se lo denominaba 'El Padre de la Música', lo que indirectamente hacia suponer que era ahí donde comenzaba la música. Lo demás era poco menos que una 'musiquita' que en el mejor de los casos poseía un interés histórico-﷓académico. A la tan denostada Edad Media era mejor ni acercarse: nada bueno podía provenir de esa Noche de los Tiempos".

Por tal razón, CHL prefiere cambiar algunos rótulos. "En la actualidad se prefiere usar el término 'Música Temprana' para referirse a toda la música escrita antes del 1600", afirma. En cuanto a la música contemporánea, separa entre la que hacen los músicos y la que hacen "los chantas". "El alejamiento del público de la música contemporánea en general se debe a la 'música para idiotas'. El público no es tonto, se harta de que le tomen el pelo. Lamentablemente esto hace que a veces obras contemporáneas que son un real aporte a la música, caigan en la volteada. De cualquier manera no debemos preocuparnos: lo bueno tiende a perdurar. El tiempo es el mejor filtro y siempre hace su trabajo", concluye.

Y sin duda, el maestro sabe de lo que habla. Un día como hoy, pero de hace cuarenta años, a sólo cinco años de su creación, el Conjunto Pro Musica de Rosario ganó premio mayor del IV Concurso Polifónico Internacional "Guido d'Arezzo", en Italia. Este sería el primero de una nutrida serie de reconocimientos que tanto el Coro Pro Musica Antiqua (que cuenta en su haber con 16 discos), como su director (precursor de la difusión de la música antigua en el país y sin duda uno de los mayores referentes en materia de dirección coral en Latinoamérica), han recibido. Y seguramente seguirán recibiendo.