Viernes, 28 de abril de 2006 | Hoy
El "boom" constructivo que se está dando en nuestra Ciudad, viene arrasando con cuanto edificio antiguo exista en las áreas más céntricas y / o de mayor atractivo para las inversores inmobiliarios, cuyo único interés parece ser el de obtener rápidas ganancias, sin importarles las necesidades del resto de los Ciudadanos en cuanto a la mejora de la calidad ambiental de nuestra urbe. Desde la Municipalidad poco es lo que se hace hasta el momento para impedir o al menos disminuir la destrucción de estos viejos edificios, que aunque no posean gran valor arquitectónico o estético, pueden seguir siendo utilizados con las debidas reformas o mejoras, y a bajo costo. Esto no va a frenarse, en la medida que las Normas no establezcan claramente la decisión de la preservación de los inmuebles patrimoniales en todo el ámbito de la Ciudad, pero generando al mismo tiempo nuevos métodos o sistemas que le posibiliten a los propietarios de los inmuebles preservables contar con los medios para su mantenimiento y mejora sin necesidad de su venta especulativa; y a las empresas e inversores contar con otros lugares donde desarrollar sus emprendimientos con mayores ventajas y menos restricciones. Con relación a estos temas, es fundamental conocer que desde el año pasado se encuentran en la Comisión de Planeamiento del Concejo Deliberante cuatro Proyectos de Normas que, de aprobarse, posibilitarían lograr el equilibrio necesario entre la preservación y la inversión inmobiliaria. Estos proyectos merecen ser conocidos por la población en general y los actores principales el desarrollo inmobiliario en particular. En innumerables ocasiones se escuchan quejas por la "inacción de los Concejales". Es preciso que se establezca clara y públicamente la actividad que desarrolla cada Edil, y en que dirección se realiza, para que el Pueblo (eso que ahora llaman "la gente") pueda determinar al valor de cada representante como tal, sin importar su inclusión partidaria. Hoy todo parece indicar que la multiplicación de torres en la ciudad (aproximadamente 350) son inevitables. Y por otro lado, los edificios, se transforman en icono del desarrollo, cuando en realidad sólo satisface a la especulación de los inversores. Hasta la cuenta el socialismo ha coqueteado con los poderes vernáculos y acepto obedientemente un modelo de ciudad según sus conveniencias. La ciudad brilla en la primera y segunda línea de bulevares y después, después la nada. Son estos temas, que trascienden el período de una gestión y aún de los de una o varias generaciones de Ciudadanos, los que permiten vislumbrar lo acertado o no que fue el Pueblo al designar a sus representantes.
Concejal Fabio Gentili
En la nota por ustedes publicada en la edición de ayer martes 25 relacionada a la situación surgida en torno a la senaduría en suspenso de Mirella Giai y en un párrafo referente a la cena homenaje que tuviera lugar el día sábado pasado se menciona por error involuntario que el agasajo fue organizado por el Partido Socialista. Queremos aclarar que el evento fue enteramente decidido, organizado y financiado por Democratici di Sinistra (Democráticos de Izquierda) de Rosario, partido que sostuvo la candidatura de Mirella Giai en el seno de L'Unione. Agradecemos la gentileza que tienen ustedes en recibir esta nota.
DS. Cordinamento Rosario
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