La incorporación de nuevas tecnologías dentro del proceso educativo es el propósito de un proyecto que lleva adelante un grupo de docentes de la carrera de Ingeniería Industrial de la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería y Agrimensura de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). La investigación comprende el análisis del desempeño docente en cátedras numerosas con la incorporación de Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) y elementos de educación a distancia. Una de las encargadas de desarrollar esta iniciativa es Sandra Fulgueira junto a Daniela Gómez y Marta Liliana Cerrano.

"Hice un posgrado en la Universidad de Córdoba sobre procesos educativos y tecnología. Dentro de ese marco desarrollé una tesis que tiene que ver con las competencias del ingeniero en relación con las TICS", comenta Fulgueira. A partir de ese hecho, y en relación a otros trabajos que había llevando a cabo con este grupo de investigación, se empezaron a pensar desde distintas materias que conforman el departamento de la carrera, la manera de utilizar las nuevas tecnologías para desarrollar las competencias de los estudiantes en el futuro profesional.

"Nos gusta el concepto de competencias, porque significa saber hacer, y nosotros creemos que es importante formar al futuro profesional en el saber hacer", opina la docente.

La investigadora considera que el uso de las TICS es fundamental, no solo tratando que la intervención del estudiante sea el camino hacia la autonomía y la autogestión para lograr una verdadera transformación individual y social, sino también para demostrar que el mismo como futuro profesional deberá estar predispuesto a estos cambios, ya que el mercado actual ha incorporado el uso de TIC en sus tareas habituales.

Sandra Fulgueira analiza los avances que tuvo el proyecto y rápidamente destaca el progreso de la inclusión de las TICS en lo que son las competencias comunicacionales: "Estamos viendo cómo las trabaja el estudiante y la utilizaría en su futuro profesional. Lo hacemos principalmente pensando en el proceso de aprendizaje, donde a priori no es tan sencillo incluirlas". Sin embargo, estas asperazas se van limando a medida que transcurre el tiempo: "Hemos notado que por una cuestión generacional, y de formación, los grupos van cambiando y no siempre nos encontramos con el mismo panorama. A mí no me costó porque vengo de esa rama, pero sí se les complica a muchos de los docentes el hecho de convivir con las TICS, y es por eso que hay que formarse", explica la docente.

Principalmente la investigación se basa en cómo los estudiantes interaccionan a través de las TICS con el objetivo de desarrollar una dinámica del trabajo colaborativo. "Lo que se está tratando de introducir es la idea de trabajos conjuntos, como son la mayoría de las experiencias de los egresados una vez que salen de la facultad. La idea es que desde algunas cátedras tengan un proceso de enseñanza basada en el aprendizaje colaborativo", propone Fulguiera.

Según las investigadoras de la UNR, con el apoyo de las nuevas tecnologías se trabaja en una enseñanza teniendo como protagonista al estudiante, centrado en el aprendizaje, siendo su desarrollo mixto, presencial y virtual. "No solamente se evalúa el producto final, que tiene que ver básicamente con el desarrollo de los conceptos de la materia, sino también el proceso de comunicación entre ellos y con nosotros. No es fácil, porque estamos en una facultad de ingeniería donde el estudiante está acostumbrado a otras modalidades de trabajo. Esta forma de comunicarnos nos permite ver el desarrollo del estudiante personalizado, realizar un seguimiento y darnos cuenta si está entendiendo o no, y así poder brindarle algún tipo de ayuda", dice.

En el modo virtual cambian las pautas de trabajo, y ese es el gran desafío para el docente y el estudiante. El proyecto apunta a que se deban rearmar el dictado de las materias pensando en este tipo de actividad, comprendiendo al proceso de construcción colaborativa como parte elemental de la comunicación y una forma de aprendizaje distinta que permite a los estudiantes a relacionarse y encontrar soluciones conjuntas.

"Lo que se evalúa es el proceso y como se llegó al resultado o resolución final. Esa es la parte que no sale a la luz en la forma tradicional de aprendizaje. Eso sí, el tiempo de corrección es el doble que un trabajo presencial", aporta la docente.

Como toda modalidad nueva, no fue simple introducirla con rapidez. "Al principio, los estudiantes usaban las distintas TICS para coordinar un lugar de reunión, salteando la faceta virtual. Pero con tiempo e insistencia por parte de los docentes, el panorama cambió. Después de cinco años intensos, es el primero en el que todos los estudiantes utilizaron desde el día cero las TICS propuestas para realizar las actividades", analiza Sandra Fulgueira.

"La idea es seguir adelante, aceitando el proceso y continuar analizando. Naturalmente este tipo de proyecto nunca se cierra porque las TICS están en constante proceso de cambio, y a su vez, los estudiantes por razones generacionales vienen más preparados que los anteriores", resume Fulgueira.

*Integrante de la Dirección de Comunicación de la Ciencia de la UNR.