Los gremios que nuclean a colectiveros y taxistas le pidieron al secretario de Servicios Públicos de la provincia, Alejandro Boggiano, que trate de contemplar "los errores que pueden cometer por estar varias horas en la calle", en el proyecto que otorga cinco puntos por año de vigencia al carné de conductor y tipifica las faltas como leves, graves y muy graves, con pérdida de puntos por cada falta sancionada por el Juez de Faltas. A la salida de la reunión, Boggiano puntualizó que las diferencias se plantearon sobre el cúmulo de faltas leves, aunque consideró que "fue muy positiva, porque los choferes defienden que haya sanciones severas para los que cometan faltas graves". Por su parte, el secretario general del sindicato de peones de taxis, Horacio Boix, señaló a Rosario/12 que esperan una "reconsideración de las llamadas faltas leves" en la sanción definitiva.

El viernes, los choferes le alcanzarán al funcionario las propuestas por escrito, y esperan encontrarse con él "dos o tres veces" para encontrar una solución a sus reclamos. Sobre el encuentro de ayer, Boggiano indicó que "surgieron inquietudes muy puntuales propias de los conductores profesionales", al tiempo que aseveró que los propios conductores "defienden sí o sí la instrumentación de un carné y la aplicación de sanciones severas para los incumplidores que cometan faltas graves; especialmente las que hacen a seguridad vial o que tienen incidencia para accidentes, como los casos de alcoholemia, semáforo en rojo o exceso de velocidad".

En este sentido, Boggiano remarcó que los choferes de colectivos y de taxis quieren "firmeza absoluta, más allá de quién sea el sancionado, incluso personas de su sector". En cuanto al eje de las diferencias, que es la pérdida de puntos por las llamadas faltas leves, el propio funcionario consideró que "se debe encontrar un consenso".

En tanto, el titular de peones de taxis, Horacio Boix, señaló ante la consulta de este diario que el funcionario provincial "ha demostrado buena disposición para escuchar nuestro reclamo, que es el de no sancionar las faltas leves de los trabajadores del volante por una simple razón: el tráfico en Rosario no está ordenado; es un descontrol".

Boix señaló que el viernes le llevarán a Boggiano una propuesta por escrito y luego se reunirán "dos o tres veces más hasta que lleguemos a alguna conclusión". El propio representante gremial reconoció: "De todas maneras le dijimos que estamos a favor de sancionar mientras sean faltas graves. Pero al transporte público de pasajeros deberían tenerle algunas consideraciones; como por ejemplo el ascenso y descenso de pasajeros, que en la zona del centro y microcentro deben hacerse en áreas que siempre están ocupadas".

La ley de carné por puntos, que fue incluida en el temario de las sesiones extraordinarias de la Legislatura por el gobernador Hermes Binner, considera que las faltas muy graves, que implicarían la pérdida de tres puntos, serían conducir alcoholizado o bajo los efectos de estupefacientes, negarse a someterse al test de alcoholemia, sobrepasar en más de un 50 por ciento la velocidad máxima autorizada, circular con la habilitación suspendida, sin la licencia, sin seguro, a contramano, o no respetar el semáforo.

En tanto, incumplir las normas de señalización, conducir en forma negligente o sin dispositivos de seguridad, viajar sin los cinturones de seguridad o el casco colocado, negarse a exhibir la documentación y detenerse en lugares prohibidos serían algunas de las faltas que implicarían la pérdida de dos puntos.

Las demás infracciones, como pisar la senda peatonal, no respetar el lugar para ascenso y descenso de pasajeros y estacionar en doble fila, no acarrerarán pérdida de puntos, salvo en caso de acumulación. Este es justamente el eje del reclamo de los trabajadores de taxis y colectivos, quienes aseguran que en el caótico tránsito rosarino, son imposibles de cumplir. Y apuntan también a la propia Municipalidad. Argumentan que muchas sendas peatonales no están señalizadas y que las zonas de ascenso y descenso de pasajeros están ocupadas por vehículos, y no son debidamente controladas por la Dirección de Tránsito.