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La justicia ordenó ayer la detención de Raúl Cazón, quien participó de la defensa de la sede de Atilra Rosario cuando intentó ser copada por el secretario nacional Héctor Ponce acompañado de 700 seguidores. La jueza María Luisa Pérez Vara y la fiscal María Eugenia Iribarren tienen

"sospechas fundadas" para detenerlo, tras identificarlo en una filmación empuñando un arma de fuego. Rosario/12 habló con Oscar Rodríguez, miembro del Consejo Directivo Nacional, quien fue herido con una bala calibre 22.: "Nos dispararon por calle Iriondo a cincuenta metros de San Luis", señaló. A pesar de conducir el grueso de la columna de militantes con remeras amarillas, aseguró que "no sabe de dónde sacaron los palos y las cadenas".

La fiscal Iribarren fue consultada ayer sobre qué hipótesis se manejaban en torno al homicidio de Cornejo: "Hubo un enfrentamiento entre dos grupos donde hubieron disparos de arma de fuego, donde hubo un muerto y heridos. Más o menos está establecido desde dónde partieron los disparos. Hay que esperar las pericias balísticas definitivas para dar certeza de dónde vinieron lo disparos". "El arma estaba en posesión de uno de los bandos y no parece que el disparo hubiera provenido de ese grupo", dijo al preguntársele si el balazo había salido del sector que había llegado desde fuera de la ciudad.

Iribarren prefirió ampararse en el secreto del sumario cuando se le preguntó si una persona, identificada como Raúl Alejandro Casón, estaría involucrada. "En este estado de la causa no puedo decirle ni sí ni no", dijo. Una alta fuente judicial confió a Rosario/12 que el plomo que dio muerte a Cornejo traspasó su cuerpo y solo puede orientar la pesquisa acerca del calibre: 32 o 38.

Rodríguez, que responde a la conducción nacional, dio la versión de los hechos: "Fuimos requisados por la policía y no nos encontraron nada fuera de lugar. Vinimos porque lo requirió un grupo de trabajadores de la seccional Rosario, que marcharon con nosotros, querían que participáramos de una asamblea porque Rosario tiene una división interna que no se soluciona".

Y agregó: "Nos esperaron con todo tipo de armamento. Nunca esperé que nuestros propios compañeros lácteos nos hubiesen esperado de esa manera. Por eso estoy seguro que dentro de las líneas de los compañeros de la seccional Rosario había gente infiltrada, no eran todos compañeros nuestros por la forma en que actuaron. Con mis propios ojos vi gente que tiraba con una escopeta recortada con perdigones".

Rodríguez es esforzó en remarcar el lugar donde fueron heridos tanto él como Cornejo "que murió en mis brazos a escasos metros de la batalla, no como dicen los medios que falleció a tres cuadras. Los tiros nos los pegaron a cincuenta metros de San Luis e Iriondo".

--Pero las fotos de los diarios los muestran recibiendo asistencia médica frente a la vivienda de Rioja 3464

--Lo que pasa es que cuando falleció lo trasladamos ahí porque la batalla era insostenible.

--¿Dónde lo hirieron?

--A la altura de la tetilla izquierda con una bala calibre 22.

--¿En qué circunstancias le pegaron el tiro?

--Yo iba al frente de la agrupación y recibí una pedrada en la cabeza, que me hizo perder el conocimiento y me provocó una herida con cinco puntos. Después recibí el tiro, y no le di importancia.

--¿Usted vio quién les disparó?

--No, lo único que puedo decir es que nunca vi una cosa así. Cómo se sentían los tiros, tanto de escopetas como de carabinas y de revólver, además de bombas de estruendo. Lo que repito es que vi a una persona parapetada con una escopeta de caño recortado, vestido con gorra, camisa y pantalón verde que tiraba a mansalva. Supongo que tiraba con perdigones porque sino hubiese hecho una masacre.

--¿Desde que lugar venían los disparos?

--Desde afuera del sindicato. Cuando llegamos estaban parapetados en una columna bastante gruesa para evitar que lleguemos a la asamblea.

--¿Cómo actuó la policía?

--La policía estaba a una cuadra, a la espera de la voz de mando. Lo que me llamó la atención es porqué la policía no actuó en ese momento. - --Desde Atilra Rosario, Edgardo Barbero denunció que ustedes llegaron con gente de la UTA Santa Fe y barras de Colón.

--No, todos los que llegaron eran trabajadores lácteos. No llevamos gente de otro gremio.

--¿Si llegaban a participar de una asamblea por qué fueron armados con palos?

--Hay fotos que muestran que llegamos con palos, pero fue cuando vimos que ellos estaban preparados para un enfrentamiento.

--Atilra Rosario denunció que el 27 de noviembre fueron golpeados por una patota que copó una asamblea en la planta de Sancor en Rosario.

--Yo estuve en esa asamblea y desmiento eso. Lo que hay es una división interna en Rosario y como se acercan las elecciones a nivel nacional, este bando de Barbero y Vega no quieren dejar de participar a nadie.