Un concejal opositor presentó ayer en el Palacio Vasallo un proyecto tendiente a suspender de inmediato el aumento a la Tasa General de Inmuebles (TGI) argumentando que "los concejales no tuvieron la posibilidad de analizar en profundidad" las razones esgrimidas por el municipio para justificar el incremento tributario. El intendente interino Miguel Zamarini, desestimó la propuesta y le atribuyó al edil cavallerista Alfredo Curi -autor de la iniciativa- intenciones de "seguir en escena en un mes como enero en el cual no hay muchas noticias". El presidente del Concejo explicó que la Municipalidad propuso subir la TGI "para poder seguir prestando los servicios de manera eficiente. No estamos hablando de cobrar algo que no se presta, o que el agua no sale de la canilla o que la luz se corta", sostuvo en una crítica por elevación hacia la Gobernación.

El concejal cavallerista justificó el proyecto presentado señalando que "es importante tener un criterio para decir por qué se aumenta en algunos casos un 10, un 20, un 50 o el mil por ciento, ya que los concejales no tuvimos la posibilidad de analizar en profundidad a qué se debía cada aumento" sugerido por la intendencia.

"Es fundamental rever esto, en momentos en que el gobierno nacional está en campaña con acuerdos contra los aumentos, mientras que en Rosario se planteó un incremento de este tipo", remarcó Curi para después anunciar su intención de "armar una comisión que esté integrada por concejales de todos los bloques, representantes barriales del Presupuesto participativo, defensa del Consumidor, la Asociación Empresaria y vecinalistas".

En diálogo con Radio Dos, Zamarini aclaró que el proyecto de Curi "es sólo una propuesta que debe reunir la mayoría necesaria para que el Departamento Ejecutivo la tenga en cuenta. No creo que prospere".

Consultado por los argumentos esgrimidos por Curi, referido al escaso tiempo y datos que tuvieron los ediles para analizar el aumento de la TGI, el intendente interino los refutó: "Los concejales tuvieron dos semanas antes de la sesión del 22 de diciembre. La Secretaría de Hacienda estaba a disposición de las comisiones que quisieran reunirse", aseveró.

"Incluso Curi estuvo en la sesión en la que se aprobó la ordenanza que ahora quiere derogar. Lo que quiere es seguir en escena porque hay pocas noticias en enero. Si el fundamento es que los aumentos fueron superiores a lo aprobado (por el cuerpo), se cayó el argumento", señaló.

"Si Curi -continuó Zamarini- me garantiza que la inflación del 2005 que duplicó la del 2004 la vuelve atrás, y consigue que los aranceles de las prepagas no suban un 50 por ciento y que el transporte interurbano no aumente un 25 por ciento, si todo eso lo logra la Tasa volvería a los valores de 11 años atrás cuando el intendente (Héctor) Cavallero la aumentó un 40 por ciento".

En ese sentido el concejal socialista remarcó que "no se pueden seguir prestando servicios esenciales a la población cuando la inflación está en alza. Se fijaron valores de Tasas acordes con los servicios que se están prestando. El municipio quiere seguir prestando esos servicios de manera eficiente, no estamos hablando de cobrar algo que no se presta, o que el agua no sale de la canilla o que la luz se corta".

Zamarini dijo que la reacción desfavorable que tuvo la medida no lo sorprendió, sino que, por el contrario, le pareció incluso "razonable" porque "es obvio que un aumento no va a ser bienvenido, pero debemos explicar cuáles han sido los fundamentos y hacer que se entienda que era necesario tomar esta medida. Soy un vecino más, me encuentro con gente que me dice se les fue la mano pero era necesario".