El secretario de la Coordinadora de Actividades Docentes (Coad), Gustavo Brufman, denunció que el edificio principal de la Facultad de Psicología "no está en condiciones para que allí se tomen los exámenes de febrero y marzo a los alumnos" y alertó también que el anexo de Corrientes e Ituzaingo "no puede albergar el normal funcionamiento de la Facultad". Según explicó el dirigente, en diciembre pasado, el anexo "fue necesario ante la inminente toma de exámenes finales". En ese momento, "se había pensado en la posibilidad de disponer del lugar también para febrero y marzo, pero la situación de hoy es realmente complicada". Es que la utilización del anexo como único espacio "no es garantía de seguridad, ya que la circulación por el lugar es dificultosa", y detalló que entre otras cosas, "no cuenta con salida de emergencia, porque se incorporó básicamente para este tipo de situaciones de urgencia, no para otra cosa.

En la primera semana de febrero, la organización gremial de los docentes universitarios convocará a una asamblea de docentes de la facultad de Psicología; y también realizará una reunión de delegados del Centro Universitario de Rosario (la Siberia). En esas dos instancias analizarán las medidas que tomarán.

La situación se complicó al paralizarse las reparaciones en la sede central de la Facultad de Psicología, en La Siberia. La reforma con ampliación de las aulas debió detenerse el martes pasado, a raíz de una denuncia de la Organización No Gubernamental Manos a la Obra por la presencia de asbesto (amianto), un material prohibido. El Ministerio de Trabajo de la provincia inspeccionó los trabajos y suspendió las actividades hasta que la empresa Arregui Construcciones no presente el protocolo de manipulación del asbesto, que está prohibido manejar en el país desde 2001, ya que la Organización Mundial de la Salud lo incluyó entre los productos cancerígenos.

Para Brufman hay tres cuestiones claves. "Por un lado, la Facultad deberá retirar los techos de asbesto que fueron desmontados en las obras de reparación, y debe hacerlo antes de que haya circulación de gente", indicó. Y afirmó que "momentáneamente" los exámenes se pueden volver a trasladar al anexo. "Esto fue lo que le planteamos al decano cuando se desató el conflicto", puntualizó, y dijo también: "Si estamos hablando del funcionamiento pleno de la Facultad en el anexo, no es posible, no se garantizan las condiciones laborales".

Desde el punto de vista gremial, Brufman puntualizó los requerimientos para que los trabajadores de la Facultad puedan volver a sus tareas. "Lo primero que se debe garantizar es el retiro urgente del asbesto sin la presencia de docentes, alumnos y personal de la facultad en el predio. Por el otro lado, la construcción del edificio por parte de la empresa debe garantizar las condiciones para los trabajadores; pero de esto ya se encargó la misma organización Manos a la Obra, en un reclamo reciente. La utilización del asbesto afecta no sólo a los compañeros de la propia empresa, sino que está directamente implicada la facultad de Psicología, como así también todo el predio de la Siberia". En esta misma línea señaló: "De momento, no tenemos conocimiento de que haya otro lugar planteado para la continuidad de las actividades".

Acerca de las respuestas que espera por parte de las autoridades de la Universidad Nacional de Rosario, el titular del Coad puntualizó: "Nosotros le reclamamos a la universidad, además de la urgente quita del asbesto del predio, que realice de manera rápida los exámenes de salud del conjunto de los compañeros de la facultad, que podrían estar más seriamente afectados por esta situación".

Para concluir, Brufman explicó: "Lejos está de nuestro objetivo transformarnos en un obstaculizador; al contrario, la función es asegurar las condiciones para el conjunto de la ciudad universitaria".