El Multimedios La Capital acató ayer al mediodía la conciliación obligatoria dispuesta por el Ministerio de Trabajo de la Nación. Los 26 despidos quedaron sin efecto durante los 15 días hábiles que dure la negociación, que se desarrollará en el ámbito nacional. Todos los trabajadores volvieron a ingresar ayer a sus lugares de trabajo en LT8, LT3, La Capital y Seller, en un clima festivo, tras una semana de conflicto. La descompresión del conflicto había empezado a forjarse anteayer, a las 18, cuando el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, citó a la primera reunión entre los cinco sindicatos en conflicto y la empresa, representada por Luis Galli y Sergio Ceroi. Aunque en esa reunión no hubo acuerdo, la parte empresaria pidió un cuarto intermedio porque ayer a la mañana regresaba al país Daniel Vila, uno de los propietarios del Grupo Uno, que maneja el multimedios. Finalmente, ayer a las 12.30, regresaron con la decisión de acatar plenamente la conciliación obligatoria. En el acto que se realizó a la noche, frente a La Capital, el secretario general del Sindicato de Prensa, Edgardo Carmona agradeció "a todos y cada uno de los trabajadores" por la actitud "decidida, inclaudicable que permitió esta gesta".

El acto incluyó cantos de todo tipo de los trabajadores, especialmente referidos a la unidad de los tres medios. "Estamos felices por el resultado, que descomprimió este conflicto", había indicado Carmona antes del acto. El dirigente gremial subrayó la decisión política de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien le pidió una activa participación en el conflicto a Tomada, el sábado pasado. Carmona señaló la capacidad del titular de la cartera laboral nacional, pero también ponderó "el sostenimiento de la posición del ministerio de Trabajo de la provincia. El ministro Carlos Rodríguez no aceptó las presiones empresarias y se mantuvo firme. Por esa actitud se pudo llegar ayer hasta la instancia nacional en estas condiciones".

En la puerta de los tres medios en conflicto, el clima era ayer de algarabía, porque se abría un ámbito de negociación, con todos los trabajadores en sus puestos de trabajo. "Remarcaría básicamente la solidaridad de todo el arco político, sindical y social, así como de las autoridades nacionales, provinciales y municipales. El rechazo al método empresario de los despidos fue unánime", apuntó Carmona, quien festejó el "entorno rodeado, solidario, muy fuerte, del conflicto, que tuvo su corolario con la llamada de la presidenta a Tomada y el apoyo fenomenal de un amplísimo espectro de la sociedad el sábado pasado por la mañana, en el Banderazo".

Para Carmona, el conflicto que mantuvo por una semana a las dos radios AM del grupo silenciadas y al diario La Capital con ediciones de emergencia, sin poder distribuirse, fue "histórico". Además, subrayó el inédito acompañamiento de las dos centrales obreras nacionales. "La conferencia de prensa de (Hugo) Moyano, titular de la CGT y de (Hugo) Yasky, secretario general de CTA, fue histórico, no había ocurrido desde el asesinato de Carlos Fuentealba", enfatizó Carmona.

En compañía de los dirigentes de los otro cuatro gremios en conflicto, Carmona consideró que la instancia de ayer se debió a la "sublime actitud de los compañeros de las radios y La Capital, que asumieron una posición superadora al desarrollar un paro solidario por despidos en otros medios". En tanto, los trabajadores volvieron ayer a la tarde a trabajar en la edición del diario, que hoy volverá a estar en la calle.