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En sintonía con el cónclave provincial, Miguel Lifschitz anunció ayer que convocará a los candidatos del Frente Progresista que compitieron en la primaria municipal para "aunar criterios de campaña y poner en la misma sintonía a todos los referentes y dirigentes de cada sector". De cara a las elecciones generales del 24 de julio, el intendente reconoció que uno de los desafíos de la coalición es retener los votos obtenidos por cada uno de los sectores internos. "La gente vota con autonomía, con independencia, los votos no le pertenecen a nadie. De todas formas es importante la opinión de los referentes de cada uno de los sectores", admitió el jefe comunal quien de todos modos vaticinó que "en una gran proporción los votos del Frente se van a orientar a Mónica Fein, es más, pensamos que vamos a recibir votos de algunos de los candidatos del peronismo que han perdido. Tenemos un muy buen trabajo en los barrios".

Lifschitz recibió ayer en su despacho del Palacio de los Leones

al candidato a gobernador del Frente Progresista, Antonio Bonfatti, a su compañero de fórmula Jorge Henn, y a la propia Fein, para "analizar y proyectar el futuro mediato en vistas a una continuidad política y programática tanto para la ciudad como para la provincia".

"Luego de la victoria en las primarias consideramos oportuno no sólo dialogar sobre las estrategias de campaña sino también en el desarrollo y proyección de las obras a concretar en forma conjunta entre municipio y provincia, dándole continuidad y respuestas a todo lo que tiene que ver con el futuro de nuestra sociedad", enfatizó Lifschitz.

El intendente valoró el triunfo obtenido en las primarias porque "esto nos da una excelente posibilidad para las elecciones del 24 de julio, tanto si analizamos las sumas matemáticas de los votos como si analizamos el desarrollo de ese resultado a lo largo y ancho de la provincia. No obstante sabemos que ninguna elección se gana por anticipado, habrá que seguir trabajando y recorrer la provincia y la ciudad para ratificar nuestra propuesta". Y enseguida sentenció: "Pero sin lugar a dudas que estamos con una muy buena perspectiva para lograr otro triunfo y así continuar gestionando en pos de este crecimiento sostenido tanto en Santa Fe como en Rosario".

Al finalizar el encuentro el intendente anticipó por LT8 que habrá "un gran diálogo" con quienes resultaron los más votados a escala municipal, a quienes convocará para definir la estrategia del Frente para retener el municipio y colaborar en el desempeño en la provincia. Entre quienes compitieron para la intendencia el segundo más votado, detrás de Fein, fue el radical Jorge Boasso quien tras obtener 112 mil votos advirtió: "El radicalismo no aceptará seguir siendo furgón de cola del socialismo", en un claro mensaje tendiente a conseguir un trato de aliado con voz y voto en la gestión de gobierno.

En ese sentido, destacó la pluralidad de la lista que el Frente presentará para el Palacio Vasallo: "La lista de concejales que va a encabezar Manuel Sicutto está integrada por distintas fuerzas del Frente, vamos a conversar con ellos y después vamos a hacer una convocatoria a la ciudadanía independiente". En efecto, la boleta que encabezará el actual presidente de la bancada socialista la integran el demócrata progresista Aldo Poy, la radical María Eugenia Schmuk, la diputada del GEN, Mónica Peralta y el actual titular del Concejo, Miguel Zamarini.

Lifschitz relativizó que surja un escenario conflictivo con el radicalismo a nivel municipal y provincial a raíz de los desacuerdos nacionales: "La realidad del Frente en la provincia no es la misma que a nivel nacional. Aquí hay una experiencia a lo largo de los años, una práctica de diálogo que se ha dado a lo largo de los años, más allá de los chisporroteos propios de la interna".