El frigorífico Swift decidió "desafectar" de la producción a 322 trabajadores en su planta en Rosario y otros 413 en San José, en la provincia de Entre Ríos, cuya planta directamente fue cerrada. La figura del "desafectado" no tiene antecedentes en la legislación laboral según reconoció el propio secretario del Sindicato de la Carne José Fantini. "La empresa dice que no tiene trabajo por la decisión del Presidente de cortar las exportaciones, por lo cual no los despide ni los suspende. Y dice que espera que el gobierno se haga cargo de sus sueldos, hasta que solucionen este problema", explicó el dirigente. Por su parte el secretario de la CGT Rosario, Néstor Ferraza, analizó ayer en un plenario del Consejo Directivo la situación luego de escuchar el relato del propio Fantini. "No vamos a dudar en salir a la calle para estar al lado de los compañeros de la carne", aseguró el dirigente luego de pedir que los trabajadores sean escuchados por el gobierno nacional, a quien le endilgó intentar "medir fuerzas con distintos sectores. En esa disputa entre el gobierno y los grandes capitales se olvidan cuáles pueden ser las consecuencias para los trabajadores".

La medida que había sido adelantada por Rosario/12 en su edición de sábado "no figura en ningún convenio laboral. Lo único que tenemos era la garantía horaria -explicó Fantini- que implica que la empresa debe hacerse cargo del salario si sucede algo que sea pura y exclusiva responsabilidad empresaria. Así que cuando preguntamos de qué se trataba esta figura, la empresa trató de explicar que no tenían trabajo para esta gente como consecuencia de una decisión política del presidente de la Nación que pretende bajar el precio de la carne cortando las exportaciones. Por eso explicaron que no los suspendían pero tampoco los despedían. Ahora tenemos el compromiso del gobierno nacional de hacerse cargo de su sueldos hasta que llegue la solución al problema".

Hoy en tanto Fantini viajará a Buenos Aires para informarse acerca de los subsidio que viene discutiendo con el Ministerio de Trabajo desde hace semanas.

Según el dirigente gremial "la figura del desafectado no encuadra dentro de ninguna legislación laboral". Aunque remarcó que "tampoco se encuadra en ningún lado la decisión presidencial de no poder exportar a una industria en crecimiento como la nuestra. Sabemos que el Presidente quiere bajar la carne a toda costa, estamos de acuerdo que es una medida que se tenía que tomar, pero hay que tener el resguardo de mucha gente porque lo primero que se pierde es la fuente de trabajo. En este momento somos rehenes de una situación en la que no tenemos nada que ver. Y entendemos que el despido de la gente es para presionar el gobierno, somos conscientes de que nos están obligando a que hagamos otro tipo de medidas, por eso somos cautos, y recorremos los carriles normales hablando con la CGT Rosario y nacional. Lo que hay que hacer es empezar a negociar otro tipo de cosas para que se vuelva a exportar, pero lo empresarios tienen que entender que no toda la carne se puede exportar porque el argentino esta acostumbrado a comer carne".

Por su parte Ferraza analizó ayer en un plenario del Consejo Directivo la situación. "Más allá de adherir, analizamos lo que ocurre no solo en el caso de la Carne sino en diferentes sectores: lo que ocurre en el cordón industrial. Antes de fin de año estuvimos reunidos con la CGT San Lorenzo y la vicegobernadora por el tema de ICI ( ex Duperial), tras lo cual intervinieron los intendentes de la zona. Pero pasó el tiempo y el conflicto sigue existiendo aunque ahora con mayor cantidad de gente despedida. Es evidente que el que no logra controlar estas dos situaciones es el Estado: en un caso el gobierno provincial y en otro el nacional. Y esto va más allá de lo que pueda haber dicho el gobernador Obeid que se manifestó contrario a la postura empresaria. Pero ni siquiera la Secretaría de Trabajo parece poder mediar en el conflicto cuando una empresa ICI especula. Por eso vamos a discutir y pedir audiencias y si es necesario hacer un movimiento frente a los frigoríficos con los compañeros de la Carne para apoyarlos. Pero es necesario que el Estado reaccione", concluyó Ferraza.