Imputado por el delito de "triple homicidio en concurso real agravado por el uso de arma de fuego", el único detenido por el triple crimen de villa Moreno, Sergio "el Quemado" Rodríguez, negó "de plano" toda participación en la masacre de los tres militantes sociales: Jeremías Trasante, Claudio "Mono" Suárez y Adrián "Patóm" Rodríguez. Aunque testigos dijeron haberlo visto la madrugada del 1º de enero en el club Oroño, donde los chicos fueron asesinados, él se situó en otro lugar. El juez de Instrucción Luis María Caterina, quien no pudo hacerle preguntas al acusado, dijo ayer a Rosario/12 que desde el juzgado están siendo "muy optimistas" con el esclarecimiento de la causa, aunque prefirió no ahondar en los detalles de la investigación. En tanto, el defensor de Rodríguez, Carlos Varela, presentará hoy un pedido de cancelación de la rueda de reconocimiento planeada para el viernes, ante la "exposición de la imagen de Rodríguez en los medios". Por el momento, no presentará el pedido de excarcelación de su defendido, aunque sí solicitó el cambio de lugar de detención para que tenga más "cercanía con su gente". Las familias de las víctimas están "seguras" de que "el Quemado" es el autor de los disparos contra los pibes; y el abogado querellante, Norberto Olivares, acusó al juez Juan José Pazos de "negociar" con Varela la entrega del imputado.

Tras viajar desde Coronda, en poco más de media hora, Rodríguez relató dentro del despacho del juzgado de Instrucción, qué hizo la madrugada de Año Nuevo. Sin embargo, no aceptó que el juez le hiciera preguntas.

Según indicó Varela, el Quemado dijo que la noche del 31 de diciembre cenó en una parrilla de Pellegrini y Francia con su pareja, sus hijos (no estaba Maximiliano) y unos amigos. Tras el brindis y mientras estaba de sobremesa, se enteró --por un llamado de la madre de Maxi-- que su hijo estaba en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (HECA) con un disparo en la cabeza. Al llegar al lugar, las cámaras de seguridad del efector lo filmaron en la sala de espera, "en estado de shock y muy nervioso". Una vez que comprobó que la situación que le habían relatado no era tal, se fue a su domicilio con su pareja.

Según trascendió, Rodríguez le dijo al juez que llegó al efector alrededor de las 3.30 de la madrugada. A esa hora, "Jere", "Patóm" y "el Mono" eran asesinados en la cancha del club Oroño, de la villa Moreno.

El "Quemado" le dijo a Caterina que se fugó a la ciudad entrerriana de Santa Elena apenas se enteró que la policía lo estaba buscando. Como justificativo, dijo que "temía represalias de la policía". Es que el "Quemado" y Maximiliano denunciaron el año pasado a personal del Comando Radioeléctrico que intervino en el asesinato del hincha de Ñuls, Diego Malkovic --amigo de Maximiliano--, al recibir un disparo en el cráneo a la salida del boliche de Alvear y Salta, en febrero pasado. Rodríguez consideró que esa presentación "podría traerle consecuencias con la policía", porque la acusación contra los oficiales tenía que ver con que los agentes le robaron un Peugeot 206 a Maxi y lo amenazaron con "matarlo como a su amigo".

Por ese hecho, la jueza de Instrucción 14º, María Laura Sabatier, procesó a dos policías de 30 y 33 años, que quedaron "en libertad con restricciones", en agosto de 2011.

Por otro lado, Varela indicó que el juez Caterina ya tiene en su poder el material fílmico de las cámaras de seguridad del Heca, de la madrugada del 1º de enero pasado. Al mismo tiempo, confió que esas imágenes "sitúan a Rodríguez en el efector" a la hora de la masacre. También indicó que "hay dos personas que pueden atestiguar dónde estuvo a la hora que mataron a los chicos. Supongo que van a ser citados por el juzgado".

Aunque para este viernes está programada una rueda de reconocimiento, en la que dos testigos deberán señalar a Rodríguez como la persona que estuvo en el club Oroño la madrugada de la masacre, Varela presentará hoy en el juzgado un pedido de suspensión de esa medida, ante la exposición de las fotografías de su defendido en los medios de comunicación. Si ese pedido no prospera, y es rechazado por Caterina, Varela recurrirá a la instancia del pedido de nulidad que deberá hacer después del procedimiento. "La velocidad de la noticia es distinta a la velocidad de la Justicia", dijo el letrado para justificar la solicitud. Consultado sobre ese pedido, el juez no marcó posición, y en los próximos días se sabrá si la medida se lleva adelante.

Por otro lado, el abogado de los familiares de las víctimas del triple crimen de villa Moreno, Norberto Olivares, dijo que la detención del "Quemado" Rodríguez "sufrió demasiada demora" porque el juez Pazos --anterior en el turno de la feria judicial-- "buscaba negociar con la defensa la entrega del imputado". Varela respondió que "si el abogado se refiere a que hubo dinero de por medio, se equivoca". Y admitió: "Sí hubo conversaciones sobre la presentación de mi cliente ante la Justicia".

Por su parte, la madre del "Mono" Suárez, "Lita" Gómez, aseguró que no le cree al acusado. "No creo que haya tanta gente que se equivoque. Me gustaría que este hombre se ponga en el lugar de los padres de las víctimas y diga la verdad", dijo la mujer. En tanto, Roxana, la hermana del "Patóm" Rodríguez se manifestó en la misma posición que el resto de los familiares y aseguró que hay testigos que vieron al "Quemado" en el lugar del hecho. Sin embargo, aseguró que hay gente que "tiene miedo" de declarar porque "saben el tipo de gente que es y le temen".

En tanto, Varela --que también defiende a Maximiliano, en la causa por lesiones a Facundo Ezequiel O., de 17 años-- indicó que el hijo del "Quemado" continúa detenido en Piñero por el ataque a balazos del 29 de diciembre pasado. "Está imputado, y estamos esperando la presentación de los testigos del hecho, en particular la novia de Maximiliano que estuvo con él ese día", señaló.