Sábado, 21 de diciembre de 2013 | Hoy
CIUDAD › DESPLAZARON DEL ENRESS A LOS QUE VOTARON CONTRA EL AUMENTO
La decisión política la tomó el propio gobernador Bonfatti y deja afuera del organismo de control de los servicios sanitarios, a dos directores que votaron en contra del aumento de la tarifa. "Es el fin de una crónica anunciada", dijo uno de los desplazados.
Por Juan Carlos Tizziani
Desde Santa Fe
El gobernador Antonio Bonfatti propuso renovar el mandato en el Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Enress) por otros cuatro años, hasta 2017, a los dos directores que votaron a favor del último aumento de tarifas de Aguas Santafesinas: el presidente del directorio, Oscar Pintos y el vice, Héctor Brachetta y designó para completar la mayoría automática al ex diputado socialista Osvaldo Fatala. Los tres pliegos fueron despachados esta semana a la Legislatura. Una decisión política que deja afuera del organismo a los otros dos directores que votaron en contra del aumento: Alberto Muñoz y Juan José Giani. El quinto era el representante del gremio de Obras Sanitarias, Julio Blas, que también apoyó el ajuste de tarifas y tiene mandato hasta mediados de 2014. "Es el final de una crónica anunciada", dijo a Rosario/12 uno de los desplazados.
Bonfatti amplió esta semana la agenda de sesiones extraordinarias de la Legislatura y mandó los tres pliegos del Enress para que sean tratados después del receso de enero. Pintos es un radical que responde al diputado Santiago Mascheroni, quien también fue director del Ente en los tiempos del pacto Carlos ReutemannHoracio Usandizaga. Brachetta, afiliado al Partido Demócrata Progresista. Y Fatala, un conocido dirigente del socialismo de Reconquista, donde Bonfatti lo designó coordinador del Nodo 1 después de su paso por la Cámara de Diputados. Tres representantes de Frente Progresista. El único director que quedó en funciones es Julio Blas, un sindicalista de Obras Sanitarias que arrancó seis meses después que sus colegas, y por lo tanto, tiene mandato hasta mediados del año que viene.
Las designaciones en el Enress responden a una clara decisión política. El gobernador propuso renovar los mandatos de Pintos y Brachetta -que votaron a favor del aumento y dejó afuera a Muñoz y Giani, que votaron en contra. El 3 a 2 que aprobó el aumento de tarifas en julio se completó con Blas. Fatala ocuparía entonces el puesto de uno de los desplazados, pero faltaría designar al reemplazante del otro.
La Asamblea Legislativa ya está convocada para el 13 de febrero y si fracasa por falta de quórum -como ocurrió varias veces este año está prevista una segunda fecha: el 20 de febrero. Y si se repite el faltazo de los legisladores, el acuerdo tácito se producirá el 24 de febrero.
Fatala ya dio por descontada su designación y la de sus colegas. "Debo agradecer al gobernador esta alta consideración de jeraquizar mi trabajo ya que el cargo en el Enress es superior a la que estoy ejerciendo actualmente", dijo a una emisora de Reconquista. "Me parece una decisión acertada, que alguien del norte de la provincia integre el directorio del Ente Regulador de Servicios Sanitarios, sobre todo por lo que se viene en materia de agua para esa zona", agregó. Si esto es así, Pintos y Brachetta completarán ocho años en el cargo, en 2017.
La fractura política se produjo a principios de julio, cuando el Enress autorizó un aumento escalonado de tarifas del 26,5 por ciento de Aguas Santafesinas en una votación dividida: 3 a 2. Pintos, Brachetta y Blas votaron a favor y Muñoz y Giani, en contra. Muñoz atribuyó el resultado a las presiones del ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio. "El ministro no se privó de ejercer toda la presión posible sobre el Enress y hasta llegó a plantear que mandaría a la Legislatura un proyecto de ley para sacarle facultades al Ente. Ciancio es rápido para cobrar y lerdo para invertir, por eso llegamos a esta situación", dijo entonces.
El aumento salió a pesar del dictamen en contra del gerente de Asuntos Legales del Ente, Francisco Iturraspe, quien recomendó al directorio no avalar el pedido de la empresa. "Nosotros creemos que renunciar a ejercer nuestras facultades regulatorias, no puede traer ninguna mejora en el sistema y que los incumplimientos deben ser sancionados y no premiados", explicó Muñoz.
"La sociedad ha sido testigo de las presiones de Ciancio sobre el Ente", dijo Muñoz. "El ministro no se privó de ejercer toda la presión posible sobre el Enress. Hasta llegó a plantear que mandarían a la Legislatura un proyecto de ley para sacarle facultades al Ente. Este es un ministro rápido para cobrar y lerdo para invertir y ese es el problema de esta discusión tarifaria. Si la provincia hubiera recompensado el esfuerzo que hicieron los usuarios el año pasado ante un aumento del 83 por ciento promedio y mantenía el nivel de inversión no habríamos llegado a esta situación", aclaró Muñoz. Esta semana le pasaron la factura política.
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